El PSA rompe el pacto del cuatripartito y abre la puerta de la alcaldía de Chiclana al PSOE

Fin a una incertidumbre que, por otra parte, siempre tuvo un final más que cantado: por abrumadora mayoría, 39 votos sobre 41, el PSA decidió ayer abandonar el pacto cuatripartito que integraba en Chiclana desde las elecciones municipales de 2007 junto a PP, IU y PA, y que permitió acceder a la alcaldía de la localidad al popular Ernesto Marín.

Esta salida precipitada del gobierno en coalición «para pasar a la oposición», permite que se abra ahora un periodo de negociación a tres bandas entre el propio PSA, el PSOE de José María Román e IU, partidos que deberán ponerse de acuerdo para ultimar los detalles de una moción de censura contra Marín.

La decisión de dejar de apoyar al cuatripartito se hacía pública ayer, minutos antes de las diez de la noche. La asamblea extraordinaria convocada por el partido nacionalista en Chiclana votaba sí a la salida del pacto, y las explicaciones, en posterior rueda de prensa, eran tajantes.

«Esta decisión sólo significa eso, que María de los Ángeles pasa a la oposición y que ahora toca hablar con todo el mundo; pero queremos que quede claro que no había nada acordado ni existe ningún tipo de compromiso previo». Eran palabras de Juan Román, vicesecretario general del PSA, que acudía ayer a la reunión más importante de la historia de esta formación en Chiclana.

Por su parte, la principal protagonista del asunto y única edil del partido en la corporación local, la propia María de los Ángeles Polanco, iba más allá: «La razón fundamental por la que se toma esta decisión es el reciente dictamen de la Mesa Antitransfuguismo, pero también la desilusión de ver que durante muchos meses este gobierno no avanzaba». Su marcha del pacto, «tomada por la mayoría aplastante de la militancia del PSA», según destacó, «no significa automáticamente gobernar con el PSOE; y eso quiero que quede muy claro», añadió. Polanco fue muy explícita al resumir el poco más de un año que ha pertenecido al gobierno de coalición en la localidad, y criticó «que ya antes de la pasada Feria de San Antonio (en junio), los miembros del PSA nos reunimos con el alcalde, Ernesto Marín, para hacerle ver que algunas cosas no se estaban haciendo bien y que había delegaciones que se gestionaban de espaldas a la localidad y a los ciudadanos».

María de los Ángeles Polanco ratificó anoche también su intención de «sentarnos a negociar con el PSOE», e ironizó con el hecho de que «a lo mejor ahora que estaré en la oposición se me hace más caso que en el último año en el cuatripartito», zanjó.

La asamblea del PSA ha roto en pedazos la estabilidad de un gobierno a cuatro bandas que nunca ha contado con la seguridad ni el empuje suficiente para conducir una ciudad del calado de Chiclana. A partir del próximo martes (el lunes es fiesta local), se iniciará una nueva etapa en principio con tres partidos (PP, IU y PA) en un gobierno en minoría.

Sin plazos previos ni un calendario cerrado, PSOE, PSA y la gestora conformada por IU en Chiclana que representa la edil Nadine Fernández comenzarán a negociar en los próximos días, aunque la edil del PSA aseguró que «ahora mismo es complicado pactar con Nadine puesto que también se le considera tránsfuga».

Ni el todavía alcalde de Chiclana, Ernesto Marín, ni el portavoz socialista, José María Román, quisieron valorar anoche la ruptura del cuatripartito.

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