«En el sprint es cuando más viva me siento»
No terminaba de ajustarse al bullicio de la ceremonia. «Antes de venir a Pekín le dije a mi pareja que el día 18 teníamos que pedalear juntos». Le temblaba la barbilla. Tenía la misma sensación de alguien que hoy empieza a practicar un deporte y dentro de cuatro años sube al podio de los Juegos de Londres. Cosas como ésa ni se sueñan. Por eso se pellizcaba a dos pasos del podio, en el velódromo de Laoshan.
Actualizado: Guardar-Desde la grada, parecía ya sin energía para el final.
-No sabía cómo iba a acabar de fuerzas. En el penúltimo sprint me he reservado para el último.
-Y arrancó a media vuelta.
-Sí, son mis primeros Juegos y venía muy ilusionada. Ha habido mucha gente que me ha ayudado, como mi entrenador, Xabier Muriel. Sin ellos no habría ganado esta medalla.
-¿Cuál ha sido el peor momento?
-A media carrera. He tenido que coger un poco de aire porque estaba siendo una carrera muy intensa. He pensado en entrar en el penúltimo sprint, pero luego lo he dejado todo para el final.
-Bronce con sangre fría.
-Así es. Nunca había salido tan tranquila a una carrera.Yo siempre salgo supernerviosa. Llevaba cuatro meses esperando este día y se me ha hecho muy largo. He trabajado mucho y tenía que hacerlo bien.
-¿Cuál es la clave en la prueba de puntuación?
-Hay que ser buena rodadora y tener un punto de velocidad. Y correr con cabeza. Si te pasas un poco, no llegas al final.
-Hace cuatro años ni siquiera andaba en bicicleta. ¿Esperaba algo así tan pronto?
-No, para nada. Pero en el pasado Mundial hice cuarta y me empecé a mentalizar para Pekín. Los Juegos han sido mi ilusión desde niña. Venir por primera vez y lograr una medalla no entraba ni en mis mejores sueños.
-Su plan, de hecho, era llegar a la plenitud en Londres 2012. ¿Irá a por el oro?
-Es que a Pekín he llegado con sólo cuatro años en el ciclismo. Al principio pensábamos que la meta debería ser Londres, pero... Bueno, ahora voy a disfrutar de esto. Tengo ganas de llegar a casa. Echo de menos a los míos. Es una medalla de todos.
-Bronce en ciclismo y, sin embargo, iba para atleta.
-Mi inicio en el ciclismo fue un poco curioso. Mi pareja, Jabier Azkue, era ciclista de pista y me animó. Me plantó en una bici y me dijo que yo valía para el velódromo. A Jabier se lo debo todo. Lo hizo para ilusionarme. Yo llevaba un vida normal, y mira.
-¿Qué pruebas practicaba como atleta?
-Fui velocista. Era rápida. Logré el récord de España de 100 metros en categoría cadete. Y creo que aún está vigente. Mi problema era el peso. Y las lesiones. Perdí la ilusión, y así no vale la pena seguir.
-Dicen que los 'pistars' están un poco locos.
-Hay que estarlo. Las chicas vamos a sesenta por hora en los sprints. Me he enganchado a esa sensación. A esa velocidad es cuando más viva me siento. Metida en un sprint. Rodeada de compañeras. Ese contacto. Al principio me asustaba mucho, pero ahora lo disfruto.
-Llaneras es el símbolo de la pista española masculina. Ahora,usted se ha convertido en la primera mujer medallista.
-Bueno, Joan es muy grande. Me viene bien tenerle cerca. Todos los consejos que me da los aplico. Siempre me enseña algo. Y yo tengo mucho por aprender. Me sobran ganas. Si he llegado hasta aquí es por el trabajo y quiero seguir trabajando. Así, a lo mejor un día le puedo apretar un poco más a Vos.
