Once años después, España recuerda con rabia y angustia, pero también con emoción por el clima de unión que se alcanzó, los cuatro días que transcurrieron entre el secuestro del concejal del PP y su asesinato a manos de ETA./ ARCHIVO
según se desprende de la declaración de Goikoetxea ante garzón

ETA pretendía repetir el secuestro de Miguel Ángel Blanco con un edil socialista

El hallazgo de tranquilizantes en los zulos de las localidades riojanas Valgañon y Pazuengos ha llevado a las fuerzas de seguridad a la conclusión de que la banda pensaba utilizarlos en posibles secuestros

MADRID Actualizado: Guardar
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Cada vez son más los detalles que se conocen sobre los planes que la banda terrorista ETA tenía pensado llevar a cabo en los próximos meses. Si esta mañana el presunto cabecilla del 'comando Vizcaya' desvelaba ante el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón que entre los objetivos de la banda se encontraba uno de sus compañeros, el magistrado Grande-Marlaka, a última hora de la noche revelaba que, además, planeaban el secuestro de un concejal socialista para repetir el crimen de Miguel Ángel Blanco, cuyo nombre podría conocerse ya en fuentes policiales.

La última hora corresponde al registro que agentes de la Guardia Civil han realizado esta madrugada en Getxo, y durante casi cinco horas, en el piso de un hombre huido tras la desarticulación el pasado martes del "complejo Vizcaya". La Benemérita se ha incautado de tres cajas de material y documentación. Según fuentes de la lucha antiterrorista, en el piso de este individuo se ha encontrado información sobre un concejal.

En la operación de desarticulación del "complejo Vizcaya" de ETA se han producido 10 detenciones, tres de ellas en Getxo, el municipio en el que residía el "liberado" y jefe de este comando , Arkaitz Goikoetxea, antes de pasar a la clandestinidad en 2003 cuando tenía pendiente la celebración de un juicio por un ataque de violencia callejera.

Fuentes de la investigación han precisado que Goikoetxea se contradijo en su testimonio y que resulta difícil determinar en qué fase se encontraba la realización de esta acción terrorista, bien en estudio o más avanzada y que es necesario profundizar en la veracidad de la misma.

El hallazgo de tranquilizantes en los zulos de las localidades riojanas Valgañon y Pazuengos despertó las sospechas de las fuerzas de seguridad sobre la posibilidad de que la ETA pensaba utilizarlos en posibles secuestros.

Aunque Goikoetxea negó esta posibilidad en un principio, finalmente ha admitido los planes para secuestrar a un concejal del PSOE con la intención de forzar al Gobierno a una negociación con la banda.

Las mismas pautas del secuestro de Blanco

De esta forma, ETA recuperaba su planteamiento de secuestrar a un concejal del partido que ostentase en ese momento el Gobierno, como ya hizo en 1997 con el edil popular Miguel Angel Blanco durante el mandato de José María Aznar.

En aquel momento, días después de la liberación del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara, la banda secuestró al concejal de Ermua y dio 48 horas al Gobierno para acercar los presos al País Vasco. La negativa del Ejecutivo hizo que los terroristas ejecutasen su amenaza y lo asesinaran.

Los seguimientos del 'comando Vizcaya' al concejal socialista se produjeron al menos cuatro meses después de la ruptura formal de la tregua por parte de ETA . En ese momento, la organización terrorista ya había retomado su campaña de atentados inaugurada con el coche bomba que Goikoetxea y otro hombre del comando hicieron estallar en agosto junto a la casa cuartel de Durango.

Esta confesión del etarra confirma la sospecha de Interior de que además, de los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, los miembros del PSOE eran objetivo prioritario de la banda, una vez que ésta responsabilizaba a los socialistas del fracaso del denominado proceso de paz.