Los heridos, aún hospitalizados

os dos familiares de la fallecida -la madre, de 65 años y el hermano, de 25- que también resultaron heridos en el tiroteo, permanecen aún ingresados en la planta de Cirugía del Hospital de Puerto Real. Madre e hijo se recuperan de las graves heridas de perdigones que sufrieron cuando intentaban socorrer a la joven asesinada, y según fuentes del Servicio Andaluz de Salud «evolucionan favorablemente». La mujer recibió numerosos balazos en el abdomen y el joven sufrió también disparos que le afectaron las zonas intestinal e inguinal. También con evolución «favorable» se mantiene Manuel S. F., el ex militar de 43 años que recibió una andanada de perdigones en uno de sus muslos y el abdomen en el primer tiroteo. En su caso, los tiros provocaron heridas de menos gravedad, que pudieron ser curadas en el área de Traumatología, en cuya planta del Hospital puertorrealeño permanecía ayer. Según el SAS no hay previsiones de que ninguno de los tres pacientes sean dados de alta por ahora, a pesar de la mejoría de las lesiones de Manuel S. F.