Los futbolistas cobran al fin un mes de salario y anulan la huelga anunciada

El primer partido de la eliminatoria a doble vuelta contra el Calahorra se jugó ayer en la propia Isla de León. Y fue solventado. In extremis, pero solventado al fin y al cabo. Los jugadores comenzaron el entrenamiento al filo de las 10.15 horas en el césped del Nuevo Municipal isleño con una reunión en el círculo central. No había noticia cierta alguna acerca del pago prometido por enésima vez por Delfín Cañas y Ángel Serrano.

En el inicio del entrenamiento había caras largas. En la banda el teléfono sonó antes de la primera media hora de la sesión. De nuevo, conciliábulo en el centro del terreno de juego. Algunos semblantes cambiaron. Los capitanes del plantel (Canito, Fernando Porto, Puli y Raúl Iglesias), junto al técnico fueron citados para una reunión en el Ayuntamiento.

Al mediodía tuvo lugar el encuentro. Se sabía que Delfín Cañas había enviado un pagaré por importe de una nómina de las cuatro pendientes (alrededor de 85.000 euros). Dicho documento bancario tenía fecha de cobro diferida en más de 90 días y por su condición intrínseca (un pagaré no es dinero porque no está avalado) no era garantía alguna de cobro. Algo por lo que los jugadores no estaban dispuestos a transigir dada la reiterada situación de impago y de necesidades acuciantes que atravesaban a la vista de no haber cobrado ni un céntimo desde que empezara 2008 en el calendario.

El propio alcalde de la localidad, Manuel María de Bernardo, y los tenientes de alcalde Mamen Pedemonte y Manuel Prado recibieron a los jugadores. Tras la conversación y algunas gestiones la situación se desbloqueó pues los futbolistas tenían un compromiso cierto que ese documento se haría dinero en metálico en cuestión de horas. Y se hizo no mediante cobertura alguna de las arcas municipales, sino con la participación de un nuevo actor en el proceso. Un empresario de la zona (no de la localidad) que dio un paso al frente. Hacía falta que alguien tomara el documento de Cañas y liquidara en efectivo su importe de manera inmediata.

El Ayuntamiento sirvió de catalizador para que se produjera la reacción necesaria. Puso en conexión al entorno de Cañas con el empresario en cuestión -que no ha autorizado se revele su nombre- y a primera hora de la tarde los pagarés fueron negociados y se facilitó la solución porque los jugadores pudieron cobrar esas cantidades. Los futbolistas aseguraron desde ese momento que se deponía el anuncio de huelga. Y que aceptaban el compromiso de Cañas de liquidar todo lo restante a final de campaña.

Viaje a Calahorra

El plantel azulino sale hoy en dirección a La Rioja para afrontar mañana domingo a las 18.00 horas el trascendental partido. El equipo partirá con moral renovada, tras la inyección económica que palie los problemas que no han dejado de atravesar, pero que ahora se mitigan en algo.

Parte con las bajas de Regino y Wicha, lesionados, y las más que probables de Galera y el meta Sergio, que tampoco están a punto por problemas físicos. De hecho, el arquero tuvo una recaída de su rodilla ayer durante el entrenamiento y lateral Chori tuvo que hacer las veces de portero durante la sesión.

No obstante, hay serias dudas de como influirá en el rendimiento de los deportistas porque los entrenamientos no han sido todo lo normales en estos días. La cabeza no ha estado centrada del todo en el fútbol y eso se ha notado porque el cuadro de Iriondo ha encadenado una serie de tres derrotas en los tres últimos partidos de liga, incluso ante rivales de mucha menor entidad. Curiosamente, en los 35 partidos anteriores el San Fernando sólo había perdido tres encuentros, lo que da prueba del descentre que ha existido y que ahora se necesita corregir con urgencia.