CRISIS. Rajoy saluda el pasado día 7 a Esperanza Aguirre, antes del discurso de ésta en el Foro ABC. / EFE
ESPAÑA

Rajoy obliga a posicionarse a los 'barones' del PP al hacer pública su pugna con Aguirre

Mayor cree que «estamos desenfocando el debate» y refleja la inquietud de las bases porque la dirección se vuelque en un duelo interno «en vez de hacer oposición»

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Tensa espera en el Partido Popular. La pugna abierta entre Mariano Rajoy y Esperanza Aguirre mantiene en vilo a la militancia, poco acostumbrada a una convulsa situación interna. Tras la derrota electoral del 9-M y la polémica intervención de la dirigente madrileña en el Foro ABC el 7 de abril -cuando abroncó a Rajoy por su forma de hacer oposición y le dejó entrever que podría competir con él por el liderazgo del PP- , la vorágine de reproches no parecen tocar a su fin. La tensión verbal se ha elevado hasta el punto de que Rajoy decidió invitar el sábado a su contrincante a «irse al partido liberal», tan sólo unos días después de que la presidenta de la Comunidad de Madrid señalara que el PSOE está más cómodo con el actual líder conservador que con ella.

Los dos contrincantes y su entorno guardaron ayer un revelador silencio, pero no así los altos cargos del partido. A dos meses vista del congreso nacional de junio, las palabras de Rajoy han obligado a los 'barones' regionales del PP y otros mandos intermedios a posicionarse en la pugna y decantarse por él o la mandataria madrileña.

Ese pronunciamiento de los dirigentes es, precisamente, lo que habría buscado Rajoy con su contundente intervención del sábado en un acto ante 1.200 apoderados del PP y varios de sus 'barones' en Elche, según interpreta el entorno de Esperanza Aguirre. La presencia 'in situ' del considerado «núcleo duro» de apoyo al líder popular avala esta tesis. Desde la primera fila del escenario ilicitano, los presidentes de la Comunidad Valenciana y Murcia -Francisco Camps y Ramón Luis Valcárcel, respectivamente- y los máximos dirigentes territoriales en Andalucía y Cataluña, Javier Arenas y Daniel Sirera, evidenciaron su adhesión a Mariano Rajoy.

Otras voces territoriales también han cerrado filas a favor de su continuidad. Entre ellas, no ha faltado la presidenta del PP vasco, María San Gil. «Es un magnífico candidato. Todos los dirigentes que estábamos en la junta directiva le hemos dicho que vamos con él y que le íbamos a ayudar», insistió ayer en declaraciones a Efe. La máxima representante del partido en Baleares, Rosa Estarás, fue más comedida pero garantizó su «apoyo» a Rajoy. En Asturias la dirección mandó el mismo mensaje y lanzó sus dardos contra los llamados 'críticos de Gijón', encabezados por el ex ministro de Fomento Francisco Álvarez Cascos.

No todos los altos cargos territoriales han salido a la palestra, pero la inesperada virulencia de las palabras de Rajoy en Elche aún resuenan en sus oídos. Mientras fuentes cercanas al máximo mandatario popular elogiaron ayer el «golpe en la mesa» de su líder, el círculo más próximo a Aguirre se mostró convencido de que «se excedió». Las acusaciones vertidas en la ciudad alicantina causaron una honda sorpresa en las personas de confianza de la presidenta madrileña, quienes rechazan lanzarse a un cuerpo a cuerpo mediante el enfrentamiento dialéctico.

Lo cierto es que el discurso cogió también desprevenidos a los 1.200 asistentes al mitin. Militantes y simpatizantes del PP presentes en el acto confesaron su «tristeza» porque el encuentro se utilizara para realizar críticas a dirigentes y familias del partido, en lugar de «dirigir las fuerzas contra el Gobierno». El alcalde del cercano municipio de Daya Vieja, Rafael Vives, se erigió en portavoz de este sector. «Nos hemos llevado una sorpresa ante el hecho de que un acto de reconocimiento a la labor intensa de quienes están a pie de urna se haya transformado en una crítica interna».

En esta tesitura, Jaime Mayor Oreja rompió también el mutismo que ha decidido guardar la antigua cúpula del PP durante el mandato de José María Aznar para realizar un desalentador diagnóstico. El eurodiputado advirtió de que no se está afrontando «correctamente» el proceso previo al congreso.

Para el ex ministro de Interior, la reflexión no debe arrancar de «etiquetas ideológicas», sino del modelo de oposición elegido para plantar cara al Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero. «Creo que estamos desenfocando lo que realmente necesita el PP, estamos desenfocando el debate y estamos haciendo lo que no debemos», advirtió en los micrófonos de la Cadena Cope. Visiblemente «preocupado» por los últimos acontecimientos ocurridos en el partido, Mayor Oreja no dudó en confesar que la formación atraviesa en la actualidad «el momento más difícil y crítico desde que arrancó la refundación» de Alianza Popular.

En '59 segundos'

En medio del debate, todos aguardan para hoy la respuesta de Esperanza Aguirre al desafío de Rajoy. Han subrayado en rojo dos citas. Por la mañana, la ex ministra de Cultura se reúne con el presidente valenciano Francisco Camps, un cónclave tras el cual ha convocado una rueda de prensa conjunta para abordar las directrices que regirán el congreso nacional de la formación. A partir de las 22.00 horas, la presidenta madrileña será la invitada estelar en el programa de TVE '59 segundos', donde hablará de su futuro político y responderá a las preguntas que le formulen los periodistas invitados. La televisión pública ha adelantado la cita a 'prime time' para aprovechar el tirón y la inusitada expectación que puede causar en la audiencia.

Aguirre pudo haber salido a la palestra el mismo sábado, si bien ha preferido mantener la calma y esperar acontecimientos. Cuando tuvo conocimiento de la invitación de Rajoy a marcharse del partido -en un discurso en el que no fue citada expresamente-, mandó contestar a su mano derecha, el vicepresidente de Madrid, Ignacio González. «¿Qué sería ideológicamente del Partido Popular si, como dice Rajoy, liberales y conservadores se fueran del partido?», ironizó el 'número dos' en la Comunidad.