Bermúdez no da por perdida la batalla por asumir el caso

Mientras Pablo Ruz sigue adelante con las diligencias para asumir, de forma definitiva, la investigación de los 'papeles de Bárcenas', el otro instructor en liza, Javier Gómez Bermúdez, que investiga la querella de Izquierda Unida por estos mismos hechos, no tira la toalla. En una nueva vuelta de tuerca en el conflicto competencial para saber cuál de los dos jueces se queda con el caso, Gómez Bermúdez dictó ayer un auto en el que «inadmitió de plano» el recurso interpuesto por la Fiscalía a su auto del pasado 20 de marzo, en el que llamaba a declarar a Luis Bárcenas, Álvaro Laspuerta y a los donantes que aparecen en los cuadernos secretos.

En la práctica, la resolución de Gómez Bermúdez supone mantener activas sus diligencias previstas para los próximos 4 y 5 de abril, pese al revolcón sufrido el jueves, cuando la Sala de lo Penal suspendió el interrogatorio de Bárcenas ante su juzgado haciendo caso al escrito de la Fiscalía, que lo tildó de «absurdo e innecesario».

Nuevos bríos

Esta decisión, lejos de hacer retroceder a Gómez Bermúdez, le dio nuevos bríos y dejó entrever que la suspensión decretada por la sala fue casi ilegal por cuestiones procedimentales. La razón es que la Fiscalía no puede recurrir en apelación las decisiones contenidas en una providencia y no de un auto.

Tras esta pulla llegó el turno de Pablo Ruz, que en el auto en el que asumió los nexos entre los pagos de la 'trama Gürtel' y la contabilidad oficial del PP decidió rechazar el requerimiento de Gómez Bermúdez para que dejara el caso.

Asimismo, Ruz preguntó a su compañero si procede plantear una cuestión de competencia ante la Sala de lo Penal, «el órgano superior jerárquico común». Esta decisión abre la puerta a la resolución del conflicto que ha dañado la imagen de la Audiencia Nacional en los últimos días, ya que Bermúdez está obligado ahora a responder y lo más lógico es que sea de manera afirmativa.

En la única comparecencia pública desde que empezó la pugna entre ambos, a principios de marzo, el juez de los atentados del 11-M aseguró que las cuestiones de competencia se resuelven con apelaciones ante la Sala de lo Penal.