Juzgan al dueño de una joyería de Cádiz denunciado por su socio por robo

Formaban una pareja sentimental, pero cuando se cortó la relación, se rompió algo más que una vida en común: también se fue al garete el negocio de joyería que habían montado al cincuenta por ciento en Cádiz capital, en una zona inmejorable como la avenida Cayetano del Toro.

La ruptura -que tuvo lugar en abril de 2008- no fue ni mucho menos amistosa, ya que uno de los socios acusó a su pareja (R. A. M.) de haberse quedado supuestamente con las joyas del negocio (por valor de 566.000 euros), con seis kilos de oro en lingotes y de buena parte del capital de la empresa. Además le denunció por haber falseado presuntamente las cuentas de la joyería y de haber llevado a cabo una administración desleal. Por todo ello, la acusación particular ha solicitado que al exjoyero se le imponga una pena de prisión de nueve años.

Piden dos años y medio

La Fiscalía, en cambio, reduce los delitos al de apropiación indebida y considera que el valor de lo sustraído asciende a unos 477.911 euros. La pena solicitada por el Ministerio Público también es menor: de solo dos años y medio de prisión, además de la devolución de 238.955 euros.

En la mañana de ayer, R. A. M. debía sentarse en el banquillo de los acusados de la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Cádiz, por todos estos hechos. Pero finalmente el juicio se suspendió porque no se presentaron tres testigos fundamentales, solicitados tanto por la defensas como por las acusaciones. La vista se ha aplazado hasta el próximo 24 de octubre, cuando la expareja vuelva a verse las caras y aclaren sus diferencias delante de un tribunal.