¡Esto no se ve!

Si a usted le gusta el fútbol, sepa que el próximo sábado es muy probable que no pueda seguir por televisión con tranquilidad el Real Madrid-Barcelona en algunas zonas. La señal de la televisión digital terrestre, la tan denostada TDT, sigue haciendo de las suyas en la provincia de Cádiz, y en la mayoría de municipios de La Janda y el litoral gaditano (en la capital también hay problemas), la señal es débil, inestable, y en algunas ocasiones, el aparato se queda, sin más, en negro.

«Aquí habrá una tragedia si no podemos ver el partido». Son palabras, medio en broma medio en serio, de Juan Carlos, uno de los camareros de la Venta Avenida en El Colorado, pedanía conileña donde los problemas con el nuevo sistema de transmisión de la imagen de televisión son más graves.

Este establecimiento, como los residenciales de Las Parcelas de Roche que se emplazan a unos cuantos cientos de metros más hacia la costa, sufre los perjuicios del cambio de señal analógica a digital, y de la falta de previsión en la acometida de las infraestructuras.

Al parecer, localidades como Conil, Barbate o Vejer están viéndose afectadas por interferencias en la señal de otro repetidor de televisión ubicado al norte de Marruecos, que hace que se debilite la calidad de la imágen en momentos de mal tiempo (fuerte viento de levante o calor extremo).

Este hecho ha llevado incluso a las administraciones de algunos municipios jandeños, como es el caso del Ayuntamiento de Barbate, a avalar que algunos canales vuelvan a la tradicional señal analógica.

Problemas con Canal Sur

En esta localidad, por ejemplo las emisiones de Canal Sur Televisión seguirán llegando hasta los hogares y locales comerciales en el sistema tradicional de emisión durante las próximas semanas. Según se explica, se trata de «un pequeño contratiempo para que la señal digital de la televisión autonómica no coincida con esta interferencia marroquí».

Pero estas soluciones de emergencias no contentan a los usuarios. Así al menos lo cree María Sánchez, una de las recepcionistas del hotel Loto de Conil, donde los problemas han provocado incluso quejas de sus huéspedes. «Llegó una clienta y nos dijo que si no podía ver la televisión, se iba del hotel», recuerda la joven.

Las pérdidas económicas, aunque no pueden cuantificarse de forma concreta, son más que previsibles sobre todo en días donde la población se cita frente a la televisión por ver un determinado acontecimiento (como es el caso del fútbol en abierto). Ventas, restaurantes y bares de la provincia lo tienen claro.

«Los clientes no ven la televisión en sus casas, y vienen a tomarse una cerveza y si ven que aquí tampoco se ve pues se marchan». Así lo narra Jesús Pérez, encargado de un bar en Vejer, que describe los mismos problemas que otros de sus paisanos; «no se ve bien La 1, ni Telecinco, a veces tampoco La Sexta; eso sí, canales marroquíes vemos alguno», bromea.

La situación, lejos de mejorar, parece empeorar a medida que pasan los días y el apagón analógico va quedando atrás. «En Chiclana también se ve la televisión cuando le da la gana», explica María del Carmen Guerrero, vecina de esta localidad costera.

Estos problemas generalizados están haciendo que en algunas casas la televisión se haya convertido incluso en un elemento de discordia familiar. «Mi mujer se pasa el día sintonizando una y otra vez los canales porque piensa que así los verá bien; pero nada».

Lo cuenta no sin cierta gracia un cliente de la Venta Antonio de El Colorado, que lamentaba ayer que el próximo sábado deberá oír por la radio el partido de fútbol más esperado del año. Y es que la TDT sigue trayendo de cabeza a miles de gaditanos, que con problemas de cobertura o señal deficiente, solo ven negro en sus televisores.