Peterhansel se rebela

Después de que el propio Stepháne Peterhansel admitiera que conocía las órdenes de las altas esferas del equipo X-Raid, y confirmara que iba a aceptarlas, nadie pensaba que iba a complicarle la victoria final a Nani Roma. Sin embargo, a la llegada de la penúltima etapa saltaba la sorpresa: Peterhansel le había recortado a Roma casi seis minutos para llevarse su cuarta etapa de este Dakar, y se colocaba primero de la clasificación general con sólo 26 segundos de ventaja. La disciplina de equipo del X-Raid establecía que el francés se iba a tragar su orgullo de campeón y, al igual que en otras ocasiones le habían beneficiado a él, ahora se iba a quedar en un segundo plano para dejar que Nani Roma celebrara con otro Dakar su histórica victoria en 2004 en motos.

Ahora nada se puede asegurar. Nani Roma, que finalizó la etapa en La Serena en tercera posición tras Peterhansel y Al Attiyah, tendrá que apretar los dientes y demostrar que si ha sido el más regular, también puede ser el más rápido. Visto lo visto este viernes, sería muy apresurado asegurar que Peterhansel le devolverá el tiempo perdido o que se dejará ganar por el español. El galo, a sabiendas de que Peugeot tiene su nombre en la agenda para su regreso, está dispuesto a olvidarse de que es el X-Raid quien le paga.

¿Quién llegará primero a Valparaíso? Este sábado el Dakar coronará al campeón de 2014, y mientras que en motos, quads y camiones está bastante enfilado, no hay nada decidido sobre el ganador final en coches. La ética de unos y otros está en entredicho. Por un lado, los hay que aprueban la decisión de Peterhansel, apoyando que las órdenes de equipo adulteran el espíritu deportivo de cualquier competición. Por otro, los hay que critican que, precisamente Peterhansel, sea contrario a una disciplina que otras veces le benefició. En medio está un Nani Roma que llegó a tener 40 minutos de ventaja sobre su compañero y máximo rival y que en la última semana de competición se ha deshecho cual azucarillo. Se presenta una última jornada en coches más que apasionante.

Coma acaricia el título

Si en coches está la competición al rojo vivo, en motos ya hay botellas de champán cerca de Marc Coma. El catalán ha ido prácticamente de paseo (si es que pilotar por las dunas de Atacama se puede considerar tal), a sabiendas de que la ventaja con la que partía le permite tomarse la recta final del Dakar con calma. Si ya lo tenía fácil, un último y fatídico problema ha acabado con las pocas opciones de victoria que aún tenía Joan Barreda, su único perseguidor. El valenciano tuvo que pararse en dos ocasiones por un accidente, cuya consecuencia más visible fue la pérdida de la horquilla delantera de su Honda. 'Bang Bang' cayó no sólo de la pelea por una prácticamente imposible victoria final, sino también del podio.

Barreda se despedirá del Dakar mucho más lejos de lo que su inicio hacía pensar, y ahora su segundo puesto lo hereda Jordi Viladoms, siempre que no pierda más de 10 minutos con Olivier Pain, que se sube al podio provisional a falta de la última etapa. La fiesta en Valparaíso está ya en marcha. Este sábado la ciudad chilena albergará la jornada final de un raid que, en palabras de muchos, ha recuperado el verdadero espíritu aventurero digno de las ediciones disputadas en África. España se despedirá, salvo contratiempo de última hora, con una victoria en motos. En coches, sin embargo, está todo por decidir.