ATLETISMO

Ramón Cid: «Las posibilidades de medallas son tan pocas que no servirán para medir el éxito»

«Tiendo al optimismo aunque mis amigos se ríen de mí», asegura el director técnico de la delegación española de atletismo ante los próximos Mundiales

MADRID Actualizado: Guardar
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El director técnico de la Federación Española de Atletismo, Ramón Cid, analiza los próximos Campeonatos del Mundo.

- ¿Cómo está viviendo su debut como máximo responsable de la selección de atletismo?

- Está siendo agridulce. Por el lado deportivo es un reto bonito, pero las circunstancias no son las mejores. La gestión y convivir con este momento de la economía hace que el campo esté muy limitado. Es una montaña rusa muy emocionante, pero por otro lado complicada.

- ¿Hasta que punto influyen los recortes económicos al estado del atletismo actual?

- Desde el punto de vista global no me puedo desmarcar de las circunstancias y hay que dar muchas explicaciones en estos momentos. Otra cosa que he aprendido es que está aflorando el espíritu romántico que siempre ha estado, aunque ahora es más evidente que se trata de un deporte olímpico y que su gran energía es la emocional, la afición, la gente que lo hace porque lo gusta, que no cobra en muchos casos.

- ¿Se notará en el futuro la reducción de recursos dedicados al atletismo?

- Es un gran obstáculo, pero de todas formas es algo que está en nuestra sociedad mientras haya despedidos, ERE... Estamos en ese contexto social y tenemos que asumirlo. Afecta porque tienes que cambiar tus hábitos de siempre y cuesta, por las circunstancias, pero tenemos que buscar la forma de salir de la crisis. Hay motivos para el optimismo porque hay gente joven muy buena y somos un deporte que ha luchado siempre.

- ¿La selección de Moscú es un proyecto de presente o de futuro?

- Convive todo. Si usamos la unidad de medida de los Juegos Olímpicos tenemos un porcentaje del equipo de posibles para Río de Janeiro y luego hay otros ilustres veteranos que son el presente. Se mezclan diferentes perfiles, gente que va todavía a coger experiencia, gente que ya tiene que asumir y gente que, por edad, son el presente, como Ruth Beitia, que en cada prueba es un homenaje que se da, o el ‘Pájaro’ Ángel David Rodríguez, que viven sobre todo el presente inmediato. Hay otro grupo de gente joven, no demasiados, que ya se tienen que ir enterando.

- ¿Qué vara de medir hay que usar para juzgar el éxito en estos Mundiales?

- El mediático serán las medallas, pero estadísticamente será una cifra que no tiene rigor y no tendría valor porque las posibilidades son tan pocas que no podemos decir muy bien o muy mal porque no haya medallas. El parámetro en cuanto a resultados serían los finalistas: si estamos entre los ocho finalistas y lo comparamos con que en Daegu tuvimos dos estaría bien. Si esos finalistas consiguen dos medallas, pues mejor. Luego habría que mirar el nivel individual, pero en líneas generales sería: finalistas, puesto teórico y valoración individual.

- ¿Presiona mucho la idea de las medallas ante el alto nivel de un Mundial?

- Lo que llega son las medallas, es lo que vende, y al final tiene ramificaciones con los patrocinadores, el Consejo Superior de Deportes… Es un bucle. Afecta, pero a veces hay que tener más capacidad de análisis, lo que queremos es hacer progresar. Si solo se quisiera conseguir medallas sería tan fácil como seguir una política exagerada de nacionalizaciones: cuatro kenianos, dos etíopes, dos nigerianos, cuatro cubanos…, y a lo mejor teníamos cuatro o cinco medallas, pero ese es un planteamiento exagerado. Compiten lo mejores del mundo y ser finalista es casi imposible en algunas pruebas. Por eso valoro mucho hasta un puesto 15, pero entiendo que a nivel público se vean más las medallas.

- ¿Hubo mucha pelea con Odriozola por esta selección?

- He conseguido ser autónomo plenamente. Tenía mis dudas porque es lógico por el tiempo que lleva, porque controla mucho del ránking europeo, mundial y sabe. Una cosa es que en un momento dado podamos hablar para saber su opinión pero las elecciones son nuestras. Fue absolutamente respetuoso con todas las elecciones que se han hecho y me consta que alguna no le ha gustado pero son cosas que tiene que asumir.

- ¿Echará de menos a algún atleta en Moscú?

- Me da pena esa gente que ha trabajado tanto y se ha quedado fuera por un poco del Mundial, algunas ausencias como el cuarto hombre de obstáculos, o que no venga Isabel Macías por las mínimas, o Naroa Aguirre, que se quedó a punto de hacer la mínima. La quinta plaza del 4x400 también me ha dado pena, pero hay que cortar en algún lado. Ha sido conflictiva la selección de 3.000 m. obstáculos por el maravilloso problema de tener a bastante gente y solo coger a tres, pero el mensaje que mandamos a nivel interno es que cuando había dudas el campeonato de España iba a ser muy importante.

- ¿Cuáles son las mejores bazas de España en Moscú?

- Eusebio Cáceres va a estar, Ruth Beitia también. Valoraré finalistas como, por ejemplo, el 4x100 por relevos contra grandísimos equipos. Sorprendentemente, van pocos mediofondistas, pero todos muy bien. Kevin López es de los que tiene que ir con responsabilidades. Llega en un estado de forma pletórico y con muchísimos recursos para cualquier situación. El de marcha es un equipo bastante bueno y es un sector con el que no me atrevería a decir nombres pero puede haber algún acercamiento a medalla, aunque están dificilísimas. Para el 1.500, David Bustos ha corrido poco, pero está bien. Natalia Rodríguez ha estado lesionada pero en el campeonato de España dio una sensación estupenda, con pocas carreras pero hacia arriba. Tiendo al optimismo aunque mis amigos se ríen de mí, pero es que lo veo muy bien.

- Hay ausencias de relumbrón para estos Mundiales: Rudisha, Blasic, Ennis, los potenciales rivales de Bolt. ¿Hasta qué punto perjudicará al atletismo?

-Rudisha era un estandarte. También Gay o Powell, así que afecta. Se nos van los mediáticos para el público más general y nos hace daño, pero en estos campeonatos siempre surge gente nueva y empiezan a ser famosos.