El recuerdo del 'thatcherismo' divide a los Comunes

La Cámara de los Comunes británica ha rendido homenaje este miércoles a la difunta primera ministra Margaret Thatcher, fallecida el pasado lunes, en un largo pleno que ha vuelto a poner sobre la mesa las controversias ante una de las figuras políticas más controvertidas del siglo XX. Así, aunque todos los partidos han coincidido en destacar su relevancia, los nacionalistas escoceses han insistido en que "ni olvidan ni perdonan". El primer ministro, David Cameron, ha sido el primero en tomar en la palabra, para alabar a Thatcher como "una extraordinaria líder y una extraordinaria mujer". El actual jefe de Gobierno ha recordado los "grandes retos" a los que tuvo que hacer frente su predecesora, con los que "hizo historia".

En un contexto en el que "no esquivó el enfrentamiento" político, "dibujó las líneas del mapa político que todavía hoy seguimos navegando", ha agregado durante el pleno, convocado en pleno receso parlamentario. Cameron ha destacado que alcanzó "importantes" logros en un momento en el que era "casi inconcebible" que una mujer ocupase un puesto tan importante. "Aquellos de nosotros que crecimos antes de que Margaret Thatcher llegase a Downing Street a veces no apreciamos el grosor del techo de cristal que ella rompió, desde una tienda de Grantham hasta el cargo más alto", ha añadido.

En su turno, el viceprimer ministro, el liberaldemócrata Nick Clegg, ha abogado por desmarcarse de las "doctrinas del thatcherismo" al mismo tiempo que llamado a reconocer los éxitos de la antigua responsable del Ejecutivo en varios ámbitos. Clegg ha pronosticado que el carácrer "inusual y único" de Thatcher perdurará en la memoria de los británicos. Por su parte, el líder del Partido Laborista, Ed Miliband, ha admitido el carácter "único" de Thatcher y el éxito de partes de sus políticas, entre las que ha citado la defensa de las Malvinas y determinadas privatizaciones. Sin embargo, acto seguido ha apuntado que no comparte "mucho de lo que hizo" y ha puesto como ejemplo el cierre de minas o su posición sobre el apartheid en Sudáfrica.

Miliband ha subrayado que su muerte es un golpe "para muchos" británicos que "admiraban" a Thatcher y "reconocían los logros personales" de su carrera política, que vivió su cumbre entre 1979 y 1990, su etapa en Downing Street.

Escocia 'no perdona'

La Cámara de los Comunes habían reservado más de siete horas para el pleno sobre Thatcher, lo que da cuenta de la importancia que la figura de la ex primera ministra tiene para el país. En 2005, cuando falleció el también ex primer ministro conservador Edward Heath, la Cámara Baja dedicó un debate de una hora a rendirle tributo.

De boca de los conservadores, se han escuchado elogios para Thatcher, mientras que los laboristas se han mostrado más críticos e incluso varios han optado por ausentarse ante lo que consideraban una pérdida de tiempo y un derroche de recursos públicos.

Sin embargo, las críticas más sentidas han llegado del representante del Partido Nacional Escoces, Angus Robertson, quien por una parte ha querido reconocer a Thatcher como una "formidable política" y, por otra, ha cargado duramente contra los criterios políticos de la difunta primera ministra.

Escocia "ni olvida ni perdona", ha advetido Robertson al referirse a la introducción en este territorio del 'poll tax' --tributo que obligaba a todos a contribuir por igual-- un año antes que en el resto de Reino Unido.