Noviembre comienza en verde

Era fiesta, pero no para la Bolsa, aunque se respiró un cierto ambiente de celebración. No al principio, dado que el selectivo español comenzaba la sesión con números rojos. Aunque no excesivos. El índice marcó los mínimos de la jornada en los 7.790 puntos. A partir de las once de la mañana el indicador comenzó a apostar por el verde. Primero, tímidamente. Luego, con mucha más decisión. Sobre todo a partir de que se comenzaran a publicar los datos económicos americanos. En primer lugar, contamos con la publicación del informe de empleo privado elaborado por la ADP, según el que durante el mes de octubre se crearon 158.000 nuevos puestos de trabajo, por encima de los 131.000 que esperaban los analistas, pero la cifra del mes de septiembre se revisó a la baja desde los 162.000 hasta los 114.000. Éste es un aperitivo antes de la publicación del informe oficial de empleo que se publicará esta tarde y según el que se espera que durante el mes de octubre se hayan creado 125.000 nuevos puestos de trabajo en el sector no agrícola.

El dato de paro semanal también fue mejor de lo esperado: el número de nuevas solicitudes de subsidios por desempleo fue de 363.000, por debajo de las 370.000 que esperaban los expertos. El dato de productividad no agrícola batió expectativas al subir un 1,9% en el tercer trimestre, una décima más de lo previsto, pero también es verdad que se revisó a la baja el dato del trimestre anterior desde el 2,2% hasta el 1,9%. Además, el índice de actividad manufacturera batió expectativas, al subir desde los 51,5 hasta los 51,7, cuando los analistas esperaban un ligero descenso hasta los 51 puntos. Eso sí, la confianza del consumidor se colocó algo por debajo de lo esperado, aunque ello no evita que se encuentre en los niveles más altos de los cinco últimos años. "Los datos están diciendo que la desaceleración se ha frenado y que el ritmo de crecimiento se ha estabilizado. Cuando miras a los fundamentales, la economía todavía sostiene mejoras de los beneficios para el próximo año", comentaba un analista en declaracions a Bloomberg. De hecho, los indicadores de Wall Street comenzaban la jornada con fuerza, mientras que el precio de los bonos caía, subiendo su rentabilidad.

Además, a las referencia estadounidenses teníamos que añadir el dato publicado en China de madrugada: el índice de gestores de compras del sector manufacturero subió en octubre de los 49,8 hasta los 50,2 puntos, clavando las expectativas que tenía el mercado.

Buena acogida de los datos en Bolsa

Este mix de referencias tuvo una muy buena acogida en los mercados. El selectivo español marcó máximos de la jornada una vez se hubieron conocido todos los datos americanos, poco antes de las cuatro de la tarde, en los 7.928 puntos. Pero, a partir de ese momento, el índice se desinfló. Al cierre, el indicador daba un último cambio en los 7.886,40 puntos, lo que supone una revalorización del 0,55%. Le ganó en rentabilidad el Ftse Mib de Milán, que subió un 1,72%. A continuación, el Ftse 100 británico, que avanzó un 1,37%, mientras que el Cac 40 francés se apuntó un 1,35%. También el Dax alemán ganó más de un punto porcentual. Por lo tanto, el Ibex-35 fue el peor indicador de la jornada, sólo por encima del PSI-20 de Lisboa, que subió un 0,40%.

Es posible que en ese enfriamiento de última hora tuviera algo que ver lo que ocurría en Grecia. La Bolsa helena cayó más de un 6% y sus bancos, más de un 10%, ante el temor de que el Gobierno no pueda sacar adelante los recortes que demanda Europa a cambio del nuevo tramo de ayudas. La próxima semana tendrá lugar la votación crucial sobre el presupuesto y las reformas estructurales. Y es posible que la coalición de Gobierno no sea lo suficientemente fuerte como para llevarlo adelante. Pero también puede ser que el selectivo español en según qué niveles comienza a sufrir cierto mal de altura.

En el Ibex, Acerinox lideró los avances, con una revalorización del 2,92%. Le siguió ArcelorMittal, que avanzó un 2,76%. Sin duda, un claro rebote después del fuerte castigo sufrido en la sesión anterior después de que ArcelorMittal presentara unos malos resultados. También Dia ganó más de dos puntos porcentuales. Mediaset, Técnicas Reunidas, OHL, Telefónica e Inditex avanzaron más de un 1%. Entre los grandes valores, al selectivo también le apoyaron Repsol, que avanzó un 0,71%, además del Santander, que subió un 0,41%, y de BBVA, que ganó un 0,25%.

En el otro lado de la tabla, Grifols fue el valor que más cayó, con un retroceso del 1,42%. A continuación, Abengoa, el otro valor que cedió más de un punto porcentual. Pero muy pocos valores más terminaron la jornada con descensos. Por ejemplo, BME, que retrocedió un 0,90%, mientras que Sacyr Vallehermoso perdió un 0,78%. Mapfre, Amadeus, el Popular y ACS completaron la lista de valores en negativo.

En el Mercado Continuo, Baviera fue el valor más rentable, con una revalorización del 4,41%, seguido de Montebailito, que se apuntó un 3,64%. Biosearch también ganó más de un 3%. Y Duro Felguera. En rojo, el peor fue Urbas, que perdió un 6,67%, mientras que Dinamia y Rovi retrocedieron más de un 3%.

Caída de la prima de riesgo

En el mercado de deuda, la prima de riesgo de España bajó hasta los 413 puntos básicos desde los 418 en que terminó la jornada anterior, aunque en los mejores momentos de la sesión llegó a caer hasta los 409 puntos básicos. El interés del bono a diez años cayó hasta el 5,60% desde el 5,63% en que cerró el miércoles. Su comparable alemán cerró la sesión en el 1,46%, porcentaje idéntico al de la jornada anterior. En la deuda a más corto plazo se observó también una mejoría: la rentabilidad del bono a dos años bajó desde el 2,94% hasta el 2,88%. El Fondo Monetario Internacional volvió a decir que está preparado para ayudar a España.

La deuda italiana se comportó de una manera muy parecida a la española. La prima de riesgo de Italia bajó desde los 348 hasta los 346 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años relajándose desde el 4,94% hasta el 4,91%.

En el mercado de divisas, el euro volvió a frustrar su ataque al nivel de 1,30 dólares. Al cierre, el tipo de cambio se situaba en 1,294 unidades. Los problemas de Grecia y los buenos datos procedentes de Estados Unidos impidieron el avance a la moneda comunitaria.

En el mercado de materias primas, descensos para el barril de Brent, de referencia en Europa, que caía hasta el nivel de los 108 dólares, mientras que el barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos, subía un 1%, para superar el nivel de los 87 dólares. El cobre también recuperó posiciones, mientras que el oro retrocedió levemente, hasta los 1.716 dólares por onza.