Bielsa: «Este partido estimula la sensibilidad del pueblo español, del País Vasco y de Barcelona»

"Este partido estimula la sensibilidad del pueblo futbolístico español, del País Vasco, de Barcelona y de todos, y ser un invitado a esta fiesta es muy lindo", ha proclamado Marcelo Bielsa, quien ha destacado la trascendencia de una nueva final para el Athletic, "especialmente visible en acontecimientos como este que ponen al descubierto el sentimiento de un pueblo, a través de un emblema que es la camiseta de este club". Sin embargo, el técnico argentino se ha mostrado muy prudente con respecto a la posibilidad de ganar el título ante "el mejor equipo del mundo", y ha reconocido que para ello "es indispensable que cada jugador esté cerca de su máximo potencial y que la organización colectiva también sea la precisa". Ha hablado con semblante serio, "porque hay veces que hay expectativas para expresarse en un clima festivo sin merecerlo". "Si sonriese se diría que estoy prematuramente alegre", ha añadido.

Bielsa no ha desmentido que se le ocurrió la idea de mandar a otro hotel a los futbolistas descartados para la final, pero una vez que preguntó a Iraola y Gurpegi y los dos capitanes le comentaron que preferían viajar y estar todos juntos en Madrid, decidió dar marcha atrás: "Reaccioné y resolví intuitivamente la situación en función del sentir del equipo. Cuando viajan más de 18 jugadores para mí es difícil decir a alguno que no va a jugar. Me pareció que dañaba al que estaba y no iba a participar en la final. Yo no he percibido malestar en nadie, y jamás hubiese querido provocar esa reacción", ha comentado.

Después de asegurar que no tenía aún decidida la alineación y no atreverse a conceder al Barça de forma tajante el cartel de favorito, "aunque los antecedentes inmediatos establecen diferencias entre ambos equipos", tampoco ha querido aclarar su futuro: "Con el club acordé hace un año la posibilidad de extender el contrato, que es una decisión de dos partes y la íbamos a considerar cuando terminaran todas las competiciones oficiales". En cualquier caso, sí ha garantizado que su continuidad no dependerá del resultado de la final copera. "No es una decisión de una parte, sino de dos", ha insistido.

Ha recordado la reciente lucha por la Liga Europa ante el Atlético y, aunque ha admitido que "perder una final siempre genera decepción", ha subrayado que "jugar otra cercana a la que se perdió es una excelente oportunidad que llena de optimismo e ilusión". También se le ha pedido su opinión sobre la repercusión que tuvo en Argentina el encuentro de Bucarest y la que también tendrá el del Calderón: "Argentina tiene episodios futbolísticos que no deberían permitir que un partido extraño concite expectativas o sea especialmente observado. Cuando un país tan rico en antecedentes e historia como Argentina pone su atención en partidos donde no intervienen sus equipos no me parece bien. Lo tomo como un síntoma de deterioro del fútbol que más quiero, que es el de mi país".