Rajoy, en una comparecencia en junio de 2010, en la que rechaza una posible amnistía fiscal. / Archivo
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El Gobierno aprueba una amnistía fiscal para conseguir que aflore dinero negro

Las rentas no declaradas que salgan sólo tendrán que pagar un "gravamen especial" del 10%, quedando así exonerado de cualquier penalización o sanción

MADRID Actualizado: Guardar
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Sacar dinero hasta de debajo de los colchones. Ese es el interés máximo de Hacienda en este año 2012 en que el Estado deberá acometer el mayor ajuste presupuestario de la historia de la democracia. El Gobierno de Mariano dejó claro este viernes que casi todo vale con tal de recaudar y lanzó una invitación a los defraudadores o a quienes tengan dinero escondido fuera de España a regularizar su situación mediante una amnistía fiscal parcial. Hacienda aspira a ingresar con esa medida 2.500 millones de euros adicionales y destinarlos a recortar el déficit.

La legislación no permite aprobar amnistías fiscales. De ahí que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, tuvo mucho cuidado de presentar la iniciativa como una medida de gracia para los defraudadores. Prefirió hablar de un nuevo “gravamen especial”, cuya adopción es fruto de la excepcionalidad de la situación económica. El mismo PP en la oposición

La medida aprobada por el Consejo de Ministros bendice, en la práctica, la regularización de las rentas no declaradas por contribuyentes del IRPF, del Impuesto de Sociedades y el Impuesto sobre la Renta de no Residentes, previo pago de un gravamen complementario del 10% del importe de los bienes y derechos aflorados.

El Gobierno dejó claro que todo contribuyente que se acoja a estos beneficios quedará exonerado de cualquier ulterior persecución. Eso sí, deberá hacerlo antes del próximo 30 de noviembre, fecha en que expira el plazo para presentar una declaración confidencial para regularizar su situación tributaria y para ingresar la cantidad aflorada.

El plan para hacer aflorar dinero negro fija también un gravamen específico del 8% para los dividendos o participaciones en beneficios de fuente extranjera derivados de la misma fuente que se repatríen hasta el 31 de diciembre de 2012.

Sanciones más duras

El Gobierno cree que esta última facilidad será un incentivo para las entidades mercantiles que no han podido beneficiarse de la exención prevista para los dividendos y rentas de fuente extranjera por estar alguna de las sociedades en países de reducida tributación (paraísos fiscales). En el resumen de la reunión del Consejo de Ministros, el Ejecutivo augura que estas entidades se verán “estimuladas a repatriar fondos a un coste reducido”.

La nota gubernamental incluye, además, un aviso a navegantes: Hacienda endurecerá el régimen sancionador tributario en 2013, una vez hayan expirado todos los plazos concedidos para la regularización extraordinaria de capitales. El que quiera saldar cuentas con el fisco ya sabe que deberá hacerlo este año, a riesgo de sufrir el que viene una sanción mucho mayor.