Desfile de Andrés Sardá. / Juanjo Martín (Efe)
SEMANA DE LA MODA DE MADRID

Juanjo Oliva reinterpreta el fondo de armario femenino

La diseñadora burgalesa ha llevado a la pasarela su tradicional creatividad en el diseño

MADRID Actualizado: Guardar
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Nuria Sardá, directora creativa de la firma Andrés Sardá, ha querido celebrar las bodas de oro de la empresa familiar con una retrospectiva que ha recreado sobre la pasarela de Madrid Fashion Week sus 50 años de historia. La firma nació en Barcelona en los 60, cuando el patriarca de la familia asumió el riesgo de romper los convencionalismos de la época.

Mucho ha llovido desde esos años oscuros en los que Andrés Sardá se alió con las mujeres para aportar luz y sugerencia a su austera ropa interior, y buena prueba de ello es la puesta en escena hecha hoy por su hija, al llenar de ritmo la pasarela y aprovechar la magia del baile para mostrar sus siempre atrevidos diseños.

Haciendo una selección de las piezas icónicas más representativas de la saga familiar, Nuria ha vestido a las modelos con bodys transparentes y fajitas propias de los 70; sujetadores de tirantes de seda y escultóricas bragas de blonda escotadas y altas de cintura de los 80.

También con el "balconette" con efecto "push up" y el fositicado body de encaje de lana de cashemire de los 90; y las aplicaciones de visón y top de tiras cruzadas a la espalda de la década del 2000. La diseñadora ha querido representar así los momentos más emblemáticos de la firma, en una colección que gira en torno al baile y a cuatro modalidades en particular: el baile español, el tango, el latino y el vals.

En la colección caben tanto los sugerentes vestidos de tul y organza como la lencería acompañada de largos flecos y de aplicaciones de piel procedentes de la firma argentina Silvina Moretti.

Mención aparte merece el apartado dedicado por Sardá al baile español, que ha querido representar con espectaculares mantillas españolas y originales peinetas, con las que la diseñadora hace un homenaje a los inicios profesionales de su abuelo, según ha comentado a Efe antes del desfile.

Inspiración oriental

Los hermanos Ailanto se han inspirado para su colección otoño-invierno en la "Chinoiserie", el estilo artístico europeo de influencia china, con siluetas lápiz ajustadas a la cintura, de corte recto y con acabados brillantes marcados por estampados florales.

En la segunda jornada de Mercedes-Benz Fashion Week Madrid, Alianto ha apostado por el vestido como el gran protagonista de la firma para la próxima temporada, construido en tejidos de aspecto brillante, lacado o barnizado de algodón satén, otomán de algodón o twedd de lana para el día, mientras que para la noche se reserva la organza, el shantung de seda o el lamé.

Los vestidos diurnos, siempre por debajo de la rodilla, concentran los detalles en el cuello, normalmente mao, y los hombros, muy marcados, y se presentan bien lisos en tonos negro, gris perla, azul petróleo o arena y marfil, o con estampados inspirados en Oriente, con coronas circulares, perspectivas de estanques con nenúfares o exóticas aves sobre ramas de tilos floridos.

El abrigo es el complemento perfecto del vestido en la colección de Ailanto, que para el día marca una silueta estricta de cintura ceñida y para la noche se torna, al igual que los vaporosos vestidos, mucho más fluida. Las veladas nocturnas de la firma se llenan de prendas desestructuradas largas, con capas superpuestas y talles que bajan a la cadera, mientras que los detalles, que de día se centran en el cuello y los hombros, caen a la línea del escote y a la espalda en las últimas horas de la jornada.

Aunque la prenda estrella es sin duda el vestido, los dos hermanos no renuncian a alguna prenda diferente, como algún pantalón pitillo o algún mono, eso sí, con los mismos estampados florales de inspiración oriental. El conjunto de la colección, en la que se toman como referentes los clásicos biombos lacados, la porcelana esmaltada, la joyería y los encajes de filigranas, da como resultado una propuesta sobria de línea muy definida.

Arzuaga juega a los contrastes

Como un juego de contrastes. Así ha querido ver la silueta femenina el próximo otoño-invierno Amaya Arzuaga, como una oportunidad para mezclar distintos volúmenes y texturas dentro de un mismo perfil, mientras que el argentino Roberto Torretta ha ubicado sus prendas en el futuro retro.

La diseñadora burgalesa ha llevado a la pasarela su tradicional creatividad en el diseño, con vestidos combinados de punto y tul, de cuero y mohair o de tul y cuero elástico. No contenta con la mezcla de tejidos, Arzuaga se atreve también a combinar volúmenes dentro de un mismo perfil, lo que da como resultado vestidos de falda mitad recta mitad con amplio volumen, logrado a base de pliegues, la marca de la casa.

Entre los volúmenes, la diseñadora apuesta por el de campana para amplios vestidos, que esconden o disimulan la silueta, y para abrigos, ya sea en colores crudos, berenjenas, negros, marinos o rojo sangre, un tono que utiliza también para sus minivestidos en cuero elástico.

Arzuaga, que presenta su colección el próximo 2 de marzo en París, introduce también el talle imperio, el escote cuadrado en sisa y el largo por debajo de la rodilla, en prendas con aplicaciones de piel bicolor y cálidos tejidos de mohair, punto de lana o pelo de cabra tibetana. La diseñadora, que apuesta la próxima temporada por las medias de punto, vuelve de nuevo a sus escotes asimétricos, aunque en esta ocasión las aberturas se prolongan desde el hombro hasta la cintura, mientras que dota algunas de sus prendas de hombros marcados y de un gran movimiento que logra colocando el tul debajo de tejidos menos estructurados, como en sus vestidos y abrigos.

Torretta apuesta por el futuro retro

Para Roberto Torretta, el próximo otoño-invierno debe estar lleno de prendas ubicadas en el futuro retro, una combinación entre lo que el argentino considera "pureza femenina" de mediados de siglo y una silueta moderna, deportiva y elegante.

Como Arzuaga, Torretta también juega con los volúmenes, los colores y las texturas en elegantes prendas que tienen el vestido como eje vertebrador, en las que el creador reintroduce las mangas ranglan y el largo por la rodilla, un clásico en la mayoría de las colecciones vistas hoy sobre la pasarela.

El toque moderno a esa visión clásica de la moda lo aportan la mezcla de colores, tejidos, texturas y formas geométricas, que le sirven al creador para confeccionar abrigos, trajes-faldas, pantalones masculinos y, cómo no, los vestidos.

Torretta mezcla hábilmente 'jacquards', lanas cocidas, cuero y ante con lentejuelas, tejidos todos ellos ideales para combatir el frío con formas limpias, como en sus abrigos lisos y estructurados. Pero si hay un denominador común en la colección del argentino es la cintura, marcada tanto en vestidos como en faldas, abrigos y chaquetas, mientras que para los vestidos de noche deja la línea recta y utiliza una paleta de colores dominada por el negro, el cobalto, el azul grisáceo, el marrón intenso o el rojo pasión.

La reinterpretación del fondo de armario femenino

"He querido reinterpretar el armario femenino con prendas que tengan varias utilizades". Así ha explicado Juanjo Oliva los diseños que ha presentado en Ifema. El diseñador ha subido a la pasarela una colección con tejidos novedosos en la que sobresalen abrigos-vestidos con vistosos volantes en el bajo. Esta colección de invierno, salpicada con estampados africanos, es una continuación de la anterior, "basándome en mis últimas creacines, he querido abrir y ampliar el armario de la mujer con una serie de prendas que hasta ahora no había trabajado", ha dicho el costurero.

Y así, en el desfile se han visto prendas básicas envueltas con un halo fresco y muy femenino. A destacar una falda mostaza con dos cremalleras que se suben o bajan al gusto. "Es una pieza que he trabajado como si fuera un pantalón vaquero", ha contado Oliva. También han llamado la atención una cazadora de corte motero con capucha de zorro confeccionada con un tejido que imitaba a la madera quemada por el sol y una trenca gris reforzada con bolsillo de de piel de zorro, detalles que esta temporada cotizan al alza. .

En la noche de Juanjo Oliva han estado presentes los encajes y los tules azules y marrones, tejidos suaves y delicados que sirven para crear hermosas faldas de varias capas con largo por debajo de la rodilla conjuntados con delicadas blusas que se adornan con tornillo metálicos, pieza que sustituye a las manidas tachuelas. Como novedad, el diseñador madrileño ha presentado un abrigo de visón despinzado en color talco con bellísimo puños de zorro, un detalle que realza y ennoblece a la prenda

Para Juanjo Oliva esta colección es muy especial porque su marido, Jeff Barges, director del estudio de la firma, ha lanzado al mercado su primera colección de complementos. "Creo que es una locura, más en los tiempos que corren, pero reconozco que ha creado unos zapatos maravillosos con tacones metálicos y adornados con tornillo, el resultado es superfemenino", ha contado. Los complementos no tienen porqué combinar entre sí, "es mejor hacer un guiño al vestido o la falda", ha comentado el diseñador.

Ángel Schlesser, Miguel Palacio y Lemoniez cerrarán la segunda jornada.

(Más información sobre la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid en MujerHoy.com)