La sede de la agencia crediticia Standard & Poor's. / Archivo
crisis financiera

S&P rebaja en dos escalones la nota de España

Pasa de 'AA-' a 'A' por la creencia de que las decisiones de los líderes europeos pueden ser insuficientes para atajar los problemas

NUEVA YORK Actualizado: Guardar
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La agencia de calificación crediticia Standard & Poor's ha cumplido con su amenaza y ha recortado en dos escalones, desde 'AA-' a 'A', la calificación de la deuda española, al mismo tiempo que ha retirado el rating 'AAA', la máxima nota posible, a Francia y Austria, según ha confirmado la agencia en un comunicado.

Con esta decisión, S&P concluye el proceso de revisión para una posible rebaja iniciado el pasado mes de diciembre en torno a la solvencia de 15 de los 17 países de la zona euro, y que finalmente ha mantenido la 'triple A' a Alemania, además de a Finlandia, Luxemburgo y Países Bajos. En el caso de los tres últimos, sin embargo, S&P varía la perspectiva a negativa.

Francia cae hasta 'AA+, al igual que Austria, con la que también comparte una perspectiva negativa sobre sus respectivas deudas, dentro de una rebaja de notas generalizada que la agencia ha extendido a nueve países de la eurozona. En este sentido, la agencia también ha rebajado en dos escalones la calificación de Italia, desde 'A' a 'BBB+' -la equipara a la de Irlanda-, y la de Portugal, desde 'BBB-' a 'BB', lo que la sitúa en grado denominado como 'bono basura'. Por su parte, la nota de Chipre baja de 'BBB' a 'BB+', mientras que Malta pasa de 'A' a 'A-', Eslovaquia de 'A+' a 'A' y Eslovenia de 'AA-' a 'A+'.

La agencia atribuye estas decisiones a cinco factores: las restrictivas condiciones del crédito, el incremento de las primas de riesgo para un amplio grupo de países, un intento simultáneo de "desapalancamiento" de los gobiernos y las familias, los pronósticos de débil crecimiento en la zona y una "amplia y prolongada disputa" entre los líderes europeos para solventar esos problemas.

"Una herencia del pasado"

El Gobierno español no ha tardado en reaccionar. El Ministerio de Economía y Competitividad ha señalado que la rebaja de la calificación de la deuda española es fruto de una situación económica heredada del pasado y ha reiterado su compromiso para revertir esta situación.

Fuentes del departamento que dirige Luis de Guindos han indicado que el Ejecutivo "toma nota" de la rebaja y han achacado esta medida a la política económica llevada a cabo durante los Gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero. "Es una herencia del pasado, igual que otras", han reiterado fuentes del Ministerio, que han incidido en que ahora el "objetivo" del Gobierno de Mariano Rajoy es "recuperar el potencial de crecimiento de la economía española" para así poder revertir esta situación. Finalmente, desde el Ministerio se ha reiterado el compromiso del Ejecutivo con una política económica comprometida con el equilibrio presupuestario y las reformas estructurales.

Bruselas califica la decisión de "incoherente"

El comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn, ha lamentado la "incoherente" decisión de Standard & Poor's y ha reclamado el refuerzo del fondo de rescate de la UE para que no se vea afectado por esta decisión. "Tras verificar que esta vez no es accidental, lamento la incoherente decisión de S&P sobre la nota de varios Estados miembros de la eurozona, en un momento en que la eurozona ha adoptado medidas contundentes en todos los frentes en su respuesta a la crisis", ha dicho Rehn en un comunicado.

El comisario de Asuntos Económicos ha asegurado que estas medidas -que incluyen mayores ajustes en los países más vulnerables, la recapitalización de los bancos, el refuerzo de los cortafuegos financieros y la mejora del gobierno económico de la eurozona- "han sido decisivas para relajar la tensión en los mercados de deuda soberana". Rehn ha reclamado de nuevo "el refuerzo de nuestros cortafuegos financieros, tanto por lo que se refiere al alcance de sus actividades como a su poder de fuego". La pérdida de la 'triple A' por parte de Francia amenaza la eficacia del fondo de rescate de la UE, que depende de las garantías de los Estados miembros y que podría ver aumentados sus costes de financiación.

Por ello, el comisario de Asuntos Económicos ha pedido "finalizar lo antes posible" la puesta en marcha del fondo de rescate permanente, cuya entrada en vigor se adelantará a julio de este año, según han pactado los Estados miembros. Este mecanismo "tendrá su propia base de capital y por ello será menos vulnerable a los cambios en los 'ratings' de sus Estados miembros", ha subrayado Rehn.