revueltas en el mundo árabe | LIBIA

La amenaza de una intervención militar se cierne sobre Gadafi

La OTAN advierte de que actuará si continúa la violencia contra la población civil, aunque siempre con el aval de la ONU

TRÍPOLI/BRUSELAS Actualizado: Guardar
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El avance rebelde hacia Sirte, en el centro de Libia, parece haberse detenido en el enclave petrolero de Ras Lanuf, en el este, de donde ha salido un número indeterminado de familias hacia Bengasi, segunda ciudad libia y principal bastión de la oposición rebelde.

"No sigáis avanzando, quedaos aquí, debemos proteger el petróleo", repetían los altavoces de un coche en el puesto de control de los milicianos en las puertas de Ras Lanuf, donde la aviación fiel al líder libio, Muamar Gadafi, bombardeó en varias ocasiones para amedrentar a los milicianos.

Saadi Gadafi, hijo del líder libio, ha echado la culpa de lo que ocurre a su hermano Seif al Islam por no haber cumplido las recomendaciones de su padre para evitar algunas de las causas que impulsaron la actual rebelión. En una entrevista con el canal emiratí Al Arabiya, Saadi Gadafi ha dicho que si su padre es reemplazado como líder, Libia se arriesga a una guerra civil, porque nadie podrá controlar al país, y ha añadido que la situación "es muy peligrosa" porque "las tribus están bien armadas".

Según la cadena catarí Al Yazira, Gadafi habría ofrecido a los rebeldes que exigen su dimisión y que controlan varias zonas del país reunirse en el Congreso General del Pueblo -órgano legislativo libio- para preparar el camino para presentar su dimisión con ciertas garantías. El Consejo Nacional Libio habría rechazado esta propuesta ya que le permitiría conseguir una salida "honorable" y porque creen que ofenderían a las víctimas de su violencia. De acuerdo con Al Yazira, Gadafi quiere garantías para él y para su familia de que no serán llevados a juicio, por lo que habría enviado como emisario al ex primer ministro Jadalá Azzouz Talhi.

En manos de la ONU

Mientras tanto, la posibilidad de que la comunidad internacional emprenda una intervención militar en Libia parece incrementarse. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha advertido a los seguidores de Gadafi de que responderán de sus actos y el uso de la violencia contra los rebeldes. La Casa Blanca ha señalado que armar a los rebeldes libios es una de las opciones que baraja, pero el Departamento de Estado ha precisado después que el embargo sobre armas para Libia aprobado por el Consejo de Seguridad de la ONU lo impediría.

"Quiero enviar un mensaje muy claro a aquellos que rodean al coronel Gadafi de que es decisión suya determinar cómo operarán en adelante y tendrán que responder de cualquier violencia que siga habiendo allí", ha manifestado Obama, que ha recalcado que la OTAN está llevando a cabo consultas en Bruselas sobre posibles medidas, incluso militares, para responder a la violencia en Libia.

La OTAN aseguró ayer que la comunidad internacional actuará si el régimen de Gadafi continúa haciendo uso de la violencia contra la población civil, aunque dejó claro que la Alianza no iniciará ninguna acción sin el aval de las Naciones Unidas. "Si Gadafi y sus fuerzas continúan atacando sistemáticamente a la población, la comunidad internacional simplemente no puede sentarse y mirar", advirtió el secretario general aliado, Anders Fogh Rasmussen.

Una de las medidas que podrían adoptarse sería el establecimiento de una zona de exclusión aérea para ayudar a los rebeldes libios, posibilidad que ha cobrado un nuevo impulso con el anuncio del apoyo a esta opción de los países árabes. Reino Unido y Francia trabajan en la elaboración de un proyecto de resolución en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para llevar a cabo esa medida, según han confirmado fuentes diplomáticas. Ninguno de esos dos países se han puesto un plazo para presentar el documento al resto de los trece miembros del máximo órgano de seguridad internacional, ya que su intención es "estar preparados" en caso de que se decida recurrir a esta medida.

La UE podría extender las sanciones

Mientras tanto, los ministros de Asuntos Exteriores del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) han pedido al Consejo de Seguridad de la ONU que proteja al pueblo libio. En su discurso, el titular de Exteriores emiratí, Abdalá bin Sayed al Nahian, ha hecho un llamamiento a "la comunidad internacional, especialmente al Consejo de Seguridad, para que asuma sus responsabilidad históricas para proteger al querido pueblo libio".

Por su parte, la Unión Europea (UE) se prepara para extender sus sanciones contra Libia y, en especial, para bloquear los recursos de algunas entidades controladas por el régimen de Gadafi. Los Veintisiete ya tienen en marcha medidas restrictivas, como prohibición de viajes y congelación de activos financieros, contra Gadafi y 25 personas de su entorno y estudian ahora la ampliación de esa lista y la inclusión en ella de personas jurídicas.

Por otra parte, el servicio de internet en Libia continuaba ayer desconectado por quinto día consecutivo. El jueves la red dejó de funcionar en la víspera de las operaciones militares del Gobierno contra los rebeldes, según Google Transparency Report. La transferencia de datos con entrada o salida en terminales libios se encuentra casi anulada desde las 16.00 GMT del 3 de marzo, si bien las líneas de comunicación están activas y aún se registra algún tráfico. "Alguien en Libia aún está viendo YouTube aunque el resto del país esté apagado", se apunta en un artículo publicado en el blog de la compañía de ciberseguridad Renesys.

El Consejo Nacional de Transición Interino (CNTR), órgano de gobierno de los rebeldes libios, ha abierto su página web (www.ntclibya.org), un día después de lanzar su twitter, que en menos de 24 horas cuenta con 3.630 seguidores. Los revolucionarios emplean las nuevas tecnologías para sustraerse al bloqueo informativo que utiliza el Gobierno. La web ofrece dos versiones, en árabe y en inglés, aunque nada más lanzarla ofrecía serias dificultades de acceso y una gran lentitud de navegación.