Cristiano se pica con Messi

Después de cuatro partidos sin marcar y espoleado por haberse visto superado por Messi, volvió Cristiano Ronaldo para aprovecharse de la debilidad de la Real Sociedad. El portugués marcó otros dos goles y rebasó al argentino en su lucha particular por el 'Pichichi', aunque el tanto de la victoria que marcó precisamente al equipo donostiarra en la primera vuelta y que pegó en la espalda de Pepe no le fue concedido a Cristiano en el acta arbitral. En el Bernabéu fue Cristiano quien fulminó en solo 22 minutos a la Real, en uno de los partidos más cómodos de la temporada para este Real Madrid que pudo tomarse un descanso ante un rival que se presentó temeroso en el Bernabéu, siempre estuvo a merced de los blancos, y se marchó goleado. El caso es que, con 25 ó 24 goles ya, 'CR7' está de vuelta y el Madrid, aunque demasiado lejos, también sigue en la pelea por la Liga, y sin desgastarse frente a la Real. Sin forzar en ningún momento el ritmo.

Mourinho recurrió a las rotaciones, reservó a Di María, Benzema -aunque al francés no fue por darle descanso-, Khedira y Albiol, concedió la titularidad a Kaká, Adebayor, Lass y Garay, y el Madrid pudo afrontar un choque muy plácido, porque la Real Sociedad nunca fue rival. Y cuando Tamudo tuvo sus oportunidades, siempre con el Madrid por delante en el marcador, el delantero catalán perdonó ante Casillas. El Madrid dominó por completo a una Real que se asustó en el fortín y los blancos pudieron jugar casi andando, ejerciendo un dominio insultante sobre un rival que en Anoeta hizo sufrir pero que en el Bernabéu fue apabullado. La goleada pudo ser más amplia si el incansable Cristiano , que es más de tres cuartos de este equipo y no se pierde ni un minuto en esta Liga, hubiese estado más fino con el remate. También lo evitó el larguero a un remate de otro reaparecido que se reencontró con el gol, Kaká, ya al comienzo de una segunda parte en la que al Madrid, ante tanta superioridad, se olvidó de la velocidad y la motivación. No a Cristiano , que lanzó hasta 14 veces a puerta, picado porque Messi no deja de marcar goles y al portugués no dejan de recordarle que el argentino es el indiscutible número uno del mundo.

Amenaza en serio a Benzema

Quien también tuvo suerte con el gol, pero porque se lo trabajó, fue Adebayor, que casi al final encontró premio a su trabajo. El potente delantero centro togolés que se estrenó ante el Sevilla y ahora, ya con dos goles amenaza muy en serio al apagado Benzema, no solo tiene remate, sino que permite más variantes ofensivas a este Madrid que en la primera mitad, sin oposición de un rival que no presionaba, tocó y llegó como quiso y tuvo una efectividad plena para sentenciar en 20 minutos. El Madrid, con Özil y Cristiano como protagonistas, se divirtió con la Real en esa primera mitad en la que los blancos, dueños del balón mientras los de Martín Lasarte esperaban, solo tuvieron un susto por un regalo de Casillas a Tamudo. Pudieron jugar con tranquilidad absoluta los de Mourinho, aunque el técnico luso se enfadó tras el descanso porque el Madrid, con un resultado tan abultado y con todo bajo control, entró en la dinámica de dejarse llevarse. Tampoco era cuestión de esforzarse con 3-0 si el enemigo no planteaba guerra. Es verdad que el Madrid se paseaba, pero la actitud de la Real no invitaba nada al sacrificio.

Con tantísima relajación, y sin aprovechar los contraataques, alguna oportunidad se le tendría que presentar también al visitante, y fue en un rebote como la Real redujo diferencias, aunque demasiado tarde. Un disparo de Tamudo acabó en una carambola y retrasó la entrada del olvidado Canales al terreno de juego. Al final, con el Madrid pensando exclusivamente en defenderse, la Real incluso se animó en campo del Madrid, aunque sin recursos.

Demasiado tarde para reaccionar ante un Madrid tan superior. Y aún hubo tiempo para otro gol de Adebayor y una trepidante jugada en velocidad a la contra del africano, a quien Labaka impidió que marcase antes cuando se plantaba solo ante Bravo. Tiene muy buena pinta Adebayor. Y a Benzema se le cierra la puerta.