Baltasar Garzón ha recusado a cinco jueces del Supremo. / Archivo
causa de los crímenes del franquismo

El Supremo tramitará la recusación de Garzón contra cinco de los jueces del tribunal que debe juzgarle

La Sala Especial del 61 tendrá que decidir en última instancia

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El magistrado del Tribunal Supremo Julián Sánchez Melgar ha admitido a trámite las cinco recusaciones presentadas por el juez suspendido Baltasar Garzón contra cinco de los integrantes de la Sala que tenían que juzgarle por prevaricación al asumir la causa de los crímenes del franquismo pese a que no era competente. Tras la decisión del alto tribunal, ahora tendrá que ser la sala especial del 61, la que en última instancia se pronuncie sobre la recusación.

Los recusados son el presidente de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, Juan Saavedra Ruiz, y los magistrados Adolfo Prego, Joaquín Giménez García, Francisco Monterde y Juan Ramón Berdugo. Garzón alegó que su intervención en varios momentos de la instrucción de la causa los inhabilita para juzgarle con la suficiente imparcialidad (artículo 219.11 de la Ley Orgánica del Poder Judicial), y les acusó también de tener intereses espúreos (artículo 219.10 de la misma ley).

El Supremo ha admitido parcialmente los argumentos del magistrado suspendido. Sólo estudiará lo relativo a la posible "contaminación" de los jueces recusados por haber participado en la instrucción, ya que se rechaza que tengan interés alguno en la causa.

Los argumentos de Garzón

Los cinco intervinieron en la instrucción de la causa cuando admitieron a trámite la primera querella contra el juez; además, realizaron diligencias previas de instrucción antes de decidir la admisión a trámite de la misma; firmaron resoluciones para denegar de plano la personación de las víctimas de los crímenes franquistas y se negaron a resolver sus diversas peticiones, entre otras actuaciones, según acredita la defensa del juez suspendido de la Audiencia Nacional.

La Sala de lo Penal del Supremo mantiene paralizado la tramitación de esta causa -una de las tres que mantiene abiertas contra el juez suspendido de la Audiencia Nacional-, con el fin de tramitar las recusaciones presentadas por la defensa del juez contra los cinco magistrados. La acusación popular, ejercida por Manos Limpias, rechaza apartar a estos jueces al considerar que Garzón busca "politizar" el caso. La última decisión adoptada por los recusados -a los que hay que sumar los otros dos magistrados que completan la sala que juzgará a Garzón, que son Andrés Martínez Arrieta y Miguel Colmenero-, fue el rechazo de la práctica totalidad de las pruebas solicitadas para el juicio por la defensa de Garzón.