Al menos 40 muertos en Afganistán en un atentado suicida perpetrado durante la celebración de una boda

Al menos 40 personas han muerto y otras 77 han resultado heridas como consecuencia del atentado suicida perpetrado durante la celebración de una boda en la provincia de Kandahar, en el sur de Afganistán, según ha informado un oficial de Policía afgana. "Un terrorista suicida entró en la celebración, en la que había centenares de personas, y se inmoló", ha indicado.

El atentado se produjo anoche en el distrito de Arghanbad, en el norte de Kandahar, una de las zonas con mayor presencia talibán y en la que las tropas internacionales tienen previsto realizar una fuerte ofensiva en los próximos meses.

Una portavoz de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF), la misión en Afganistán liderada por la OTAN, ha expresado su preocupación por lo ocurrido y ha dicho que efectivos de las tropas han colaborado con las fuerzas de seguridad locales en la evaluación de los daños producidos por el atentado.

Poco después del ataque, algunos de los invitados, presas del pánico, pensaron que se había tratado de un bombardeo aéreo. Las celebraciones de boda en ciertas áreas rurales de Afganistán suelen contar con la asistencia de numerosos invitados, algunos de los cuales tienen la tradición de realizar disparos al aire, lo que en alguna ocasión ha confundido y ha provocado algún ataque de las tropas internacionales. "Este es un asunto afgano", ha añadido la portavoz de la ISAF.

Milicia antitalibán

Según el diario estadounidense The New York Times, el novio de la boda formaba parte de una milicia antitalibán local formada con la colaboración de las fuerzas especiales del Ejército de Estados Unidos. En la celebración, añade el rotativo, estaba presente el líder de dicho grupo armado, Mohammed Naji Kako, que habría resultado herido en el ataque.

En los últimos cinco días han perdido la vida en Afganistán 23 soldados extranjeros, cuatro de ellos por el derribo de un helicóptero en la vecina provincia de Helmand y los demás por explosiones de bombas y tiroteos.

A falta de confirmar la autoría de la explosión, el suceso ha tenido lugar menos de una semana después de la celebración de la 'jirga de la paz', un cónclave de líderes tribales y administrativos afganos para buscar el fin a la guerra en el país. La 'jirga', una iniciativa del presidente, Hamid Karzai, aprobó un plan de éste para lograr la paz con los talibanes, y apoyó una amnistía parcial para los insurgentes que abandonen las armas.