Dos familias de Jerez declaran sobre el supuesto robo de sus bebés

Dos familias de Jerez de la Frontera han prestado hoy declaración en las diligencias abiertas para investigar sus denuncias sobre el supuesto robo de tres niños, dos de ellos hermanos, nada más nacer en la ciudad gaditana, y que ha llevado, en uno de los casos, a la imputación de un médico ya jubilado.

En este último caso, el juzgado de instrucción número 3 de Jerez de la Frontera investiga la denuncia sobre el robo de una niña que nació en 1967 en el antiguo Hospital Santa Isabel de Hungría, en un caso por el que, desde el pasado mes de febrero, hay un médico jubilado imputado, según ha informado a EFE la abogada de las denunciantes.

La niña supuestamente robada nació "bien, en un parto sin ningún problema" en el que la madre, que hoy tiene más de ochenta años, la vio "muy grande" y escuchó incluso sus llantos, ha explicado su abogada.

Sin embargo, a las pocas horas a la madre le dijeron que la niña había fallecido y no volvió a ver a su pequeña, que, según le dijeron después, fue enterrada en una fosa común del cementerio jerezano a pesar de que la familia tenía un seguro de defunción y disponía en el camposanto jerezano de sus propios nichos.

"Todo apunta a que el hospital se hizo cargo del enterramiento porque nadie dio parte al seguro de defunción de la familia", ha explicado la letrada.

Aunque "muchas cosas no cuadraban", los padres de esta niña visitaron durante años esa fosa común, acompañados muchas veces de otros de sus hijos, que a lo largo de los años escucharon al padre, ya fallecido, contar la historia de la hermana fallecida.

Hace un tiempo, ante sus sospechas, decidieron denunciar los hechos para determinar si aquella hermana no murió y fue dada en adopción irregularmente sin el consentimiento de sus padres.

La madre y una de las hijas de aquella niña han relatado hoy todos los detalles sobre el caso en el juzgado de instrucción número 3 de Jerez de la Frontera, que investiga el caso dentro de un sumario en el que desde el pasado 14 de febrero está imputado un médico ya jubilado.

Los padres de otros dos hermanos que nacieron en el hospital de Jerez en los años 1971 y 1972 y que, según les dijeron en el centro médico entonces, fallecieron poco después de haber nacido, han acudido también hoy a la fiscalía de Jerez para prestar declaración en las primeras diligencias sobre la denuncia sobre el supuesto robo de estos bebés.

Su abogado, Martín de la Herrán, ha explicado que hay "muchas contradicciones" en la documentación del hospital, tanto del nacimiento de estos hermanos como sobre su fallecimiento.

En el primero de los partos, la madre, que entonces tenía 21 años e iba a dar luz a su primer hijo, recuerda que tras el nacimiento la metieron unas horas "en un cuarto oscuro" que a ella le pareció el cuarto de limpieza y ni siquiera llegó a ver a su bebé, ni vivo ni muerto, ha explicado el letrado.

Un año después la mujer acudió al mismo hospital para dar a luz por segunda vez y recuerda que en aquella ocasión sí llegó a ver a su hijo tras el parto, que, según le dijeron, falleció poco después.

En este caso los dos pequeños fueron enterrados en un nicho del cementerio de Jerez, por lo que el abogado espera que se ordene la exhumación de sus restos para cotejar su ADN.