El Gobierno espera que los agentes sociales afronten el nuevo curso con «ánimos renovados»

Ha pasado más de un mes desde que el presidente del Gobierno dio por roto el diálogo social y José Luis Rodríguez Zapatero se ha vuelto a ver con los representantes de los sindicatos y la patronal. Aunque en la agenda no figuraba el diálogo social y sí la Ley de Economía Sostenible, que el Ejecutivo quiere tener lista para antes de que acabe el año, el encuentro se ha interpretado como un intento por desatascar las conversaciones.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, ha apuntado que el Gobierno confía en que los agentes sociales afronten el nuevo curso político con "ánimos renovados" y muestren "voluntad constructiva" frente al proceso de diálogo social durante la reunión de hoy.

De la Vega ha insistido en que el Ejecutivo "sigue trabajando, dialogando y confiando en la capacidad de acuerdo con los agentes sociales en los grandes temas de Estado". Según ha explicado, Zapatero convocó "de manera positiva" a esta reunión a los secretarios generales de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, así como a los presidentes de las patronales CEOE y CEPYME, Gerardo Díaz Ferrán y Jesús Bárcenas. El objetivo del encuentro, que comenzaba a la 13.30 horas en el Palacio de la Moncloa y ha durado hasta pasadas las 16.00 horas, era trasladar a los agentes sociales las principales "líneas maestras" de la que será la nueva Ley de Economía Sostenible, cuyo fin es incentivar un nuevo modelo de crecimiento económico. Según la vicepresidenta, la nueva ley conllevará un modelo productivo basado en las tecnologías, la educación y la modernización de la economía que servirá para "acelerar" y dar "el empuje definitivo" para la recuperación económica y la creación de empleo. Fuentes de la Moncloa habían precisado que el encuentro no tendría cobertura informativa al tratarse de un almuerzo informal.

Al término de la cita, en la que también han estado presentes la vicepresidenta segunda y ministra de Economia, Elena Salgado, y el titular de Trabajo, Celestino Corbacho, Presidencia del Gobierno ha emitido una nota en la que explica que Zapatero ha pedido a los agentes sociales que aporten ideas a la Ley de Economía Sostenible y les ha emplazado para nuevas reuniones de carácter técnico en las próximas semanas.

Según el comunicado, en la reunión, el presidente ha expuesto a sus interlocutores los aspectos esenciales de la nueva ley, "que diseña un nuevo modelo de la economía productiva para que no esté tan apoyado en el sector de la construcción, sino más bien en sectores ligados a la innovación e investigación, nuevas tecnologías y en las energías renovables". Ese neuvo marco legal "pretende reorientar el sector del turismo al impulsar su actividad con un criterio sostenible, de calidad y de respeto al medio ambiente", algo en lo que ya se está trabajando.

Sin diálogo desde julio

La cita ha servido servir para romper el hielo entre Gobierno y sindicatos y los representantes de la patronal. Sus relaciones se congelaron en la última semana de julio tras la ruptura de las negociaciones. Zapatero y los representes de las centrales mayoritarias, UGT y Comisiones Obreras, dieron por acabado el diálogo social por las diferencias con los empresarios, que reclamaban una reforma laboral y una rebaja de cinco puntos para las cotizaciones sociales.

Ya el pasado viernes, en su comparecencia posterior al Consejo de Ministros para hacer blance político y persentar los objetivos gubernamentales del nuevo curso político, Zapatero anunció su intención de reunirse con los interlocutores sociales en la primera quincena de septiembre para debatir el contenido de la Ley de Economía Sostenible e impulsar así el diálogo social. El presidente reiteraba entonces que el diálogo social es un "elemento fundamental y estratégico" de la política del Gobierno desde 2004 y "lo va a seguir siendo", aunque apuntaba que el objetivo de la reunión sería debatir la ley de economía sostenible, y no las cuestiones por las que se rompió el diálogo en julio.