«Zapatero siempre ha entendido la importancia que tiene el PSOE-A»

Manuel Chaves asegura que ha cambiado el chip. José Luis Rodríguez Zapatero le encomendó colaborar con Elena Salgado para desencallar la reforma del sistema de financiación autonómica. La misión se ha cumplido en el último momento. Y todo en la misma semana en la que el PP ha presentado una nueva querella contra él ante el Supremo por presunto trato de favor a una empresa en la que está empleada su hija.

–¿Los casos de corrupción afectan igual a los partidos de izquierda que a los de derecha?

–El PP piensa en un fenómeno que no le perjudica, por lo menos a corto plazo. Si se toma como referencia lo que ha ocurrido en la Comunidad Valenciana en las últimas elecciones europeas, el PP creo que está en un proceso de ‘berlusconización’, es decir, que a un partido de derecha los casos de corrupción no le afecta desde un punto de vista electoral y eso le da tranquilidad. Pero a largo plazo estos casos tienen su coste electoral.

–¿Considera que decisiones como las de Luis Bárcenas o Francisco Camps tras ser imputados por el Supremo ponen muy alto el listón para que un dirigente dimita?

–No creo que ellos coloquen ningún listón, cada político actúa según su conciencia. Tengo claro que si hubiera un tesorero en el PSOE que se pudiera encontrar, hipotéticamente, en la situación de Bárcenas, en mi partido no hubiera ocurrido lo que está ocurriendo en el PP. La sospecha de una presunta corrupción se extiende ya desde los pies a la cabeza del PP.

–Usted dijo que creía saber dónde estaba el límite de bajeza política, pero reconocía que se había equivocado al comprobar la actitud del PP de Andalucía en el ‘caso Matsa’

–A mí me duele que en la política se actúe de una forma amoral y sin escrúpulos. Llevo muchos años en política y he visto en la estrategia del PP de Andalucía una actuación sin escrúpulos y políticamente amoral. Creo que Arenas se tiene que dar cuenta de que para ganar unas elecciones en Andalucía no puede pasar por encima de una serie de valores morales y éticos y, sobre todo, lo que no se puede utilizar es a la familia ni a los hijos, porque eso hace mucho daño.

–El PP le ha acusado ante el Tribuna Supremo de prevaricación y tráfico de influencias

–Animé al PP a que acudiera a los tribunales para que dejara de manipular a las instancias judiciales, sobre todo al Tribunal Supremo con eso de anunciar que presentaba una querella, luego decir que la retiraba y ahora comprobar que la amplía. Estoy muy tranquilo y quiero que se aclare todo lo antes posible, por eso no me asusta la denuncia.

–¿Y en cuanto al fondo de la denuncia?

–Hay que valorar si una multinacional que invierte 200 millones de euros en una zona deprimida de Huelva y crea 400 puestos de trabajo tiene o no derecho a recibir una ayuda pública por el simple hecho de que Paula Chaves trabaje en esa empresa, porque mi hija no es dueña ni accionista, sólo trabaja en esa empresa y, como ha quedado demostrado, no interviene en el caso de este expediente, y eso el PP lo sabe.

Nuevo modelo

–Al final, el ‘sudoku’ de la financiación se ha resuelto añadiendo más ceros. ¿Los que rechazaban el ‘café para todos’ se han conformado con una taza mayor que el resto?

–El acuerdo se ha basado en dos claves: las comunidades necesitaban más financiación para sostener los servicios públicos que prestan a los ciudadanos y preservar la igualdad de todos los españoles a la hora de acceder a los servicios fundamentales, independientemente del lugar donde residan

–Pero el PP denuncia que atenta contra esa igualdad que usted preconiza

–Si se examina el modelo aprobado, en el fondo de garantías, que es el más importante del sistema y que acapara el 80% de los recursos para educación, sanidad y servicios sociales, la nivelación está garantizada al cien por cien. Todos los españoles reciben la misma financiación per cápita.

–¿Por qué da la sensación de que la negociación de los modelos de financiación se convierten en una subasta donde Cataluña siempre puja la primera y la última?

–No ha sido ninguna subasta, pero hay que reconocer que ubicar la financiación de Cataluña en un sistema multilateral ha ocasionado históricamente dificultades porque es una región que aporta mucho a la riqueza nacional. No se puede decir que las dificultades hayan provenido sólo de Cataluña. La negociación con Andalucía también ha sido delicada.

–¿Y cómo han logrado garantizar la igualdad en las comunidades donde la población no ha crecido?

–Ahí hemos tenido más dificultades porque en algunos territorios ha descendido la población. Para garantizar la igualdad hemos ponderado variables como la dispersión o el envejecimiento de la población, lo que ha permitido que aumente la financiación de esas comunidades.

–¿Por qué ha declinado el Gobierno especificar cuánto dinero reciben cada comunidad?

–Nunca se ha establecido lo que percibirá cada comunidad porque esas cantidades van a evolucionar con el desarrollo del sistema. Ahora bien, cada gobierno regional conoce la cantidad inicial que se le ha atribuido y sabe por qué concepto la recibe. Las cantidades definitivas no se conocerán hasta 2012.

–¿Cataluña es la que más gana, porque es la que más batalla?

–Cataluña no es la que más gana. El PP ha vuelto a intentar crear agravios comparativos con Cataluña y con Andalucía, basándose en una incomprensible ‘catanalofobia’ e, incluso, ‘andalucíafobia’.

–¿El nuevo modelo pone fin a la polémica de las balanzas fiscales?

–El modelo no se basa en las balanzas fiscales. Lo que es extraño es que este debate lo vuelva a sacar, no un nacionalista catalán, sino la presidenta de la Comunidad de Madrid, que pertenece a un partido nacional.

–¿El sistema de financiación acerca a las comunidades del sistema general a los niveles del País Vasco y Navarra?

–Si hablamos de financiación per cápita, no. Pero se ha producido una reducción entre las diferencias que existían entre los sistemas de concierto del País Vasco y Navarra con respecto al resto.

Poner la mano

–Todo lo aprobado se tiene que concretar ahora en las comisiones bilaterales mixtas. ¿Atisba que habrá dificultades?

–La gran incoherencia del PP es no aceptar el modelo de financiación y luego poner la mano en las comisiones bilaterales mixtas para recibir el dinero. Las comunidades del PP deberían reflexionar en que si reciben más dinero que con el anterior sistema y si hay más igualdad entre las comunidades el dilema es o se apoyan los intereses de los ciudadanos o se apoyan los intereses partidarios. Cuando se celebren las comisiones mixtas no habrá ningún problema.

–El PP, al final, ha tenido que recurrir a la disciplina de partido para abstenerse en la votación sobre el nuevo modelo...

–Las declaraciones de sus dirigentes son propios de una jaula de grillos. Si el PP dice que este modelo beneficia a las comunidades más prósperas, también tiene que decir que entre las más prósperas están la Comunidad Valenciana, Madrid, Murcia o La Rioja, todas gobernadas por el PP. Dicen que es un modelo antisocial, pues hay que recordar que el 80% del sistema va a políticas sociales; otros critican que aumentan el déficit público, pero te encuentras a presidentes del PP que reclaman más dinero aunque sea a costa de incrementar el déficit; Esperanza Aguirre dice que el sistema beneficia a Cataluña y Andalucía, y Javier Arenas lo critica porque dice que perjudica a Andalucía. Sería bueno que se pusieran de acuerdo entre todos.

–Termina su mandato como secretario general del PSOE en Andalucía en 2012. ¿Repetirá en el cargo?

–La decisión se adoptará en 2012, pero creo que no es bueno la bicefalia. No es bueno separar la figura de secretario general del partido de la de presidente de un gobierno, aunque excepcionalmente podría funcionar. Por lo tanto, mi intención es dejar la secretaria general del PSOE de Andalucía en 2012.

–¿Hay ‘feeling’ con Rodríguez Zapatero?

–Siempre lo ha habido, desde que se celebró el congreso de 2000 donde fue elegido secretario general del PSOE. Siempre ha habido ‘feeling’ y muy buena comunicación porque él siempre ha entendido la importancia que dentro del partido tiene el PSOE de Andalucía y la importancia también que tiene Andalucía, no como caladero de votos del PSOE, sino fundamentalmente el papel que representa Andalucía en los equilibrios territoriales de España y en la solidaridad entre todas las comunidades autónomas.

–¿Qué diferencia encuentra con su anterior etapa en el Gobierno central, con Felipe González de presidente, y ahora?

–Son épocas distintas. Cada maestro tiene su librillo y cada presidente del Gobierno tiene su forma de gobernar. Soy una persona con experiencia y tengo la facilidad de cambiar el ‘chip’ con rapidez y adaptarme a las nuevas circunstancias.

–Los gobiernos locales se han quedado esperando la reforma de su sistema de financiación, anunciada por el gobierno. ¿Cuándo la acometerán?

–La negociación sobre la financiación local se ha iniciado, pero es cierto que una vez que tenemos un nuevo sistema de financiación autonómico hay que abordar la situación de los ayuntamientos españoles. Y creo que hay que abordarlo con alguna medida financiera que alivie su situación, más allá de lo que ya ha representado el fondo de los 8.000 millones durante 2009 y el fondo que se pondrá en marcha en 2010. El próximo martes recibo a una comisión de la Federación Española de Municipios y Provincias para conocer sus planteamientos y comenzar la negociación.