La Policía francesa busca a los dos presuntos etarras implicados en el tiroteo a un gendarme

Dos supuestos miembros de ETA han herido a primera hora de esta tarde a un gendarme de un tiro en la mano. El suceso se ha producido en el departamento de Lozere (48), cuando los agentes han sorprendido a los etarras robando un vehículo, un Citroen C4 que tenía las llaves puestas, en la localidad de Saint Enimie, en torno a las 13.00 horas. Uno de los presuntos terroristas se ha dado a la fuga con el coche y el segundo le ha acompañado con otro vehículo.

El propietario del Citroen se ha dado cuenta del robo y ha avisado al cuartel de la Gendarmería local, que ha enviado a una patrulla para investigar el caso. Durante el trayecto los gendarmes se han cruzado con el vehículo robado, que estaba estacionado al lado de un segundo coche, por lo que se han dirigido hacia el lugar para recuperarlo.

Uno de los ocupantes ha salido con una pistola en la mano y ha efectuado dos disparos contra el agente que se dirigía hacia él a pie. El gendarme ha sido alcanzado en la mano y ha tenido que ser operado en un centro médico cercano aunque no se teme por su vida. Los dos etarras se han dado a la fuga en el segundo coche, pero lo han abandonado más adelante y han robado un tercero con el que han proseguido la escapada. La Gendarmería francesa ha puesto en marcha el Plan Epervier ('gavilán') para intentar localizar a los dos presuntos etarras. La búsqueda, en la que participan tres helicópteros, ha trascendido el departamento de Lozere y se ha ampliado por las regiones fronterizas de Midi-Pirineos y Aquitania.

La Subdirección Antiterrorista de la Policía Judicial francesa se ha hecho cargo de la investigación del ataque y las pesquisas incluirán la recogida de huellas y posibles muestras de ADN de los vehículos sustraidos por los etarras y el análisis de la munición utilizada en el disparo contra el agente. Con estas pruebas y los testimonios de los agentes atacados y otros posibles testigos, los investigadores franceses intentarán determinar la identidad de los dos presuntos etarras.

Francia mantiene la presión sobre ETA

Este tiroteo se ha producido diez días después de que la policía francesa detuviera en París a un presunto miembro de la banda que iba armado con una pistola y conducía un coche robado. Se trata de Iker Esparza Ortega, con antecedentes por terrorismo callejero y que portaba en el momento de su arrestro varios juegos falsos de documentación, un revólver y un pen-drive.

La captura del presunto etarra se practicó de madrugada por una patrulla de la seguridad urbana, que encontró sospechosos los movimientos de un coche en una zona. Los agentes se dirigieron a identificar al conductor, pero el automovilista se dio a la fuga, por lo que la patrulla emprendió su persecución hasta que logró interceptar al coche. Los agentes comprobaron que el vehículo estaba robado y llevaba placas de matrícula falsas. Su arresto se produjo el mismo día en que la organización terrorista afirmaba, en el diario vasco Gara, que está inmersa en un proceso de reflexión para fijar una "estrategia político-armada eficaz" tras reconocer el "bloqueo" en su objetivo de alcanzar la independencia en el País Vasco.

ETA dispara en territorio galo

El 28 de noviembre de 2001 un gendarme resultó herido de gravedad en un tiroteo con miembros de ETA en la localidad de Lucq-de-Béarn, en el suroeste del país. En febrero del año pasado la justicia francesa condenó por estos hechos al ex jefe 'militar' de ETA Juan Ibon Fernández Iradi, 'Susper', a 30 años de cárcel.

Aquel tiroteo se produjo dos semanas después de otro intercambio de disparos que las autoridades francesas atribuyeron a miembros de la banda terrorista. El 1 de diciembre de 2007, miembros de ETA asesinaron en la localidad de Capbreton, al suroeste, a los guardias civiles Raúl Centeno y Fernando Trapero, que participaban en labores de seguimiento a la banda terrorista. En los últimos ocho años los etarras han protagonizado cinco tiroteos en suelo francés.