PRESENTACIÓN. Augusto Méndez de Lugo, presidente del TSJA, muestra la memoria. / LUCÍA RIVAS
Ciudadanos

La apertura de nuevos juzgados no impide que el atasco judicial en la provincia se agrave

La última memoria del TSJA revela que los órganos de Cádiz tuvieron en 2008 una mayor capacidad de resolución pero fue insuficiente

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Mismo análisis y un diagnóstico más preocupante podría ser el resumen del contenido de la Memoria del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), concerniente al año 2008. Una vez más el presidente del Álto Tribunal, Augusto Méndez de Lugo, volvió a insistir en que el actual modelo judicial ya está agotado. En el informe que presentó ayer abogó por un gran pacto que saque de la parálisis a la Justicia. Esa definición sin paños calientes se refleja claramente en las cifras de actividad plasmadas en la memoria.

En el caso de Cádiz -extensible al resto de provincias andaluzas- los datos cantan por sí solos: pese a que la planta judicial ha crecido en los últimos años con nuevos juzgados y se ha mejorado notablemente la capacidad de resolución (dan carpetazo a más asuntos que en el ejercicio anterior), el número de casos pendientes que quedan al cierre del año es superior. Como si fuera una gran bola de nieve, pese a que hay más medios, el colapso judicial se agrava cada vez más.

De todas las jurisdicciones, en 2008 sólo la rama de Menores concluyó el ejercicio con menos asuntos sin resolver que en 2007 (1.269, frente a los 1.333 del año anterior). Ésta es la excepción porque el resto dejó para 2009 una rémora más pesada de casos que no pudieron ser cerrados. La razón de esta mayor carga de trabajo reside en la litigiosidad. Los ciudadanos acuden más a los juzgados y si a esto se le suma la coyuntura económica actual, con cierres de empresas, despidos y una mayor conflictividad laboral, el problema de colapso no es que deje de ser crónico sino que encima se agrava.

Estos argumentos explicarían que los órganos judiciales que han visto crecer en 2008 su carga de trabajo por encima de la media provincial sean aquellos que dirimen asuntos civiles, laborales y relativos a empresas. Los juzgados de Primera Instancia acabaron el año con 2.000 asuntos más sin resolver que al inicio de 2008, elevando su bolsa de asuntos pendientes a los casi 9.000 casos. El TSJA no escatima en adjetivos pesimistas para definir la situación de «alarmante» y en su análisis provincial subraya cómo los órganos de Jerez y Algeciras de esta rama sobrepasaron los límites aconsejables de trabajo en un 121% y un 130%, respectivamente.

La mayor litigiosidad es más que evidente en Lo Social, que recientemente fue reforzada con la puesta en marcha del tercer órgano en Jerez. Si bien, su influencia en la estadística es inexistente porque empezó a asumir casos a principios de este año. Los juzgados gaditanos de esta rama recibieron en 2008 7.801 casos, cuando en 2007 ingresaron 5.117. Ese incremento en el volumen de trabajo tuvo su repercusión al final del ejercicio, cuando los asuntos pendientes se dispararon hasta cerca de los 6.000, pese a que en enero habían comenzado con una rémora de poco más de 3.000.

Una zona carcelaria

Aunque la cifra de aumento más destacable se encuentra en la jurisdicción de Vigilancia Penitenciaria. Si bien, aquí ha sido determinante que se haya abierto en 2007 Puerto III. De ahí que haya sido la segunda rama que ha recibido más trabajo (13.349 casos), sólo superada por los órganos de Instrucción, los más números, que se repartieron 61.063 asuntos.

También es sintomática la evolución en la Audiencia Provincial. Desde la apertura de las sedes desplazadas en Algeciras, Jerez y Ceuta, las cinco salas que quedaron en la capital vieron cómo se caía su actividad, hasta el punto de estar lejos de los límites de carga de trabajo (módulos) que fija el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Sin embargo, desde 2004 están recibiendo más asuntos.

Otros capítulos de la memoria del TSJA tampoco reflejan síntomas de mejoría en cuanto al funcionamiento de la Justicia en la provincia. Nuevamente Cádiz es una de las zonas que aglutina más sedes conflictivas. Esta etiqueta la utiliza el Álto Tribunal para incluir aquellos juzgados que tienen una evolución negativa.

De los cinco órganos señalados en 2007 -dos en Chiclana, uno de La Línea y el único de Ubrique- sólo ha salido de la negra lista el nº 3 de Chiclana, donde han rebajado su bolsa de casos penales sin resolver con respecto al ejercicio anterior. Además, durante 2008, la planta judicial de la provincia fue una de las que estuvo sometida a una vigilancia más estrecha por el TSJA, ya que siguieron la actividad desarrollada en 13 órganos, donde se habían detectado las primeras anomalías.

Seis juzgados más

Para hacer frente a esta alta litigiosidad, el TSJA recomienda la apertura de seis nuevos juzgados (la misma cifra estimada en el anterior informe para 2008). Aconseja la aprobación del nº 6 de Primera Instancia de Cádiz para que se dedique en exclusiva a los asuntos de familia, el nº 2 de Lo Mercantil en la capital, (una rama especialmente afectada por la crisis y cuyo único órgano provincial arrastra dificultades desde 2005), el nº 2 de Lo Social y el tercer Contencioso en Algeciras, el nº 6 de Primera Instancia e Instrucción de El Puerto y el segundo de Vigilancia Penitenciaria en la misma localidad. Estos refuerzos se añadirían a los cinco juzgados previstos para este año: dos en Jerez, uno en Algeciras, uno en Chiclana y otro en La Línea.

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