Cómo se las maravillarían ellos con El Gordo

Cádiz es una provincia llena de proyectos, ideas y oportunidades para invertir 300.000 euros o, en el mejor de los casos, los tres millones procedentes del Primer Premio Gordo del Sorteo Extraordinario de Navidad de la Lotería Nacional.

Pocas personas hacen planes sobre el proyecto al que destinarían un premio tan goloso cuando compran el décimo. Quizá porque no quieren hacerse las ilusiones del cuento de la lechera y llevarse un chasco y una desilusión, si no les toca. O sencillamente porque, como la mayoría de los españoles, «compro Lotería por tradición», «por ilusión», o «por si le toca a los de mi trabajo y yo no he comprado». Estas suelen ser tres de las respuestas habituales de los compradores de suerte en estas fechas. Aunque, quizá, la frase estrella que más pronuncian los agraciados cada día 22 de diciembre entre champán, gritos y vecinos sea: «Utilizaré el premio para tapar agujeritos». Deudas en tiempos de crisis e hipotecas.

Preguntamos a cinco personas destacadas del mundo cultural y empresarial de la provincia sobre su tradición al comprar Lotería de Navidad, así como sobre cuáles serían sus proyectos e ilusiones cumplidas, en caso de ganar el primer premio. También por qué no: por sus sueños de lechera. Las respuestas son tan variadas como las personalidades de estos gaditanos: Algunos reforzarían sus proyectos empresariales, como Josefa Díaz (directora del hotel temático de Las Cortes de Cádiz) o Andrés Fernández (gerente del mítico Vapor de El Puerto). O el galerista gaditano Rafael Benot, que si bien «también taparía agujeros», aconseja el Arte como una gran inversión para el dinero.

El arquitecto José Ángel González habla, de la «Lotería Sostenible», y se refiere a ella como aquella que termina «repartidita» y extiende la ilusión y la felicidad que se le supone a este Sorteo. Y en este sentido responde a este periódico, -fuera de foco- el popular cantaor chiclanero Alonso Núñez, Rancapino, que a sus 63 años de edad y siete hijos, afirma: «Ojú chiquillo, si me tocara la lotería haría feliz a mucha gente; orientaría a mis niños y les garantizaría un futuro». Ojalá que la suerte les acompañe.