Corbacho rectifica y asegura que nunca habló de «suprimir» la contratación de inmigrantes en origen

Dos días ha tardado el Gobierno en rectificar al ministro de Trabajo, que anunció su intención de suprimir las contrataciones de inmigrantes en origen para recolocar a los parados españoles. El rechazo a esta propuesta, que no conocían las centrales sindicales, fue generalizado. Aunque las críticas más duras han partido desde Izquierda Unida, que ha acusado a Celestino Corbacho de "propagar la xenofobia".

La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha sido la encargada de contener el aluvión de reproches y acusaciones y ha aprovechado la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros para corregir al ministro de Trabajo y asegurar que el próximo año "habrá las contrataciones en origen que se necesiten", e incidía en que la "aproximación a cero" del volumen del contingente de trabajadores extranjeros anunciada por Corbacho no supone ningún cambio en la política de extranjería del Gobierno.

Tras la intevención de De la Vega, el titular de Trabajo ha decidido matizar su propuesta y ha asegurado que "nunca" habló de liquidar las contrataciones en origen ya que, según ha asegurado, las considera "el mejor instrumento para regular los flujos migratorios". "En mi declaración dije que España respetaría todos los convenios internacionales que tiene firmados y los que tenga que firmar", ha matizado en declaraciones a Cadena Ser.

Corbacho ha destacado estar "totalmente de acuerdo" al respecto con la De la Vega y ha explicado que "lo único que dijo y mantiene" es que las contrataciones en origen se corresponden con un catálogo de ocupaciones de "difícil cobertura". "Con la situación de dos millones y medio de parados, y muchos de ellos extranjeros, parece razonable que aquellos puestos que podamos cubrir con las personas que están paradas, se cubran por el mercado español. Después, los que no puedan ser cubiertos, se recurra a esa contratación", ha detallado.

El Gobierno mantendrá su política de inmigración

La vicepresidenta ha restado importancia al anuncio de ayer de Corbacho al considerar que sus palabras no reflejan un cambio en la política de inmigración que ha llevado el Ejecutivo desde la pasada legislatura. "Llevamos ya casi cinco años promoviendo una política de inmigración legal y ordenada, que está relacionada con el mercado laboral y se instrumenta en acuerdos de cooperación y colaboración con lo países emisores y los países de tránsito de la inmigración a través de convenios internacionales", ha explicado la vicepresidenta.

En este sentido, destacaba que la contratación en origen "se ha mostrado como una buena herramienta para lograr el objetivo de una inmigración legal y ordenada", por lo que asegura que el Gobierno va a seguir "en la misma línea": la de "buscar el equilibrio" entre los contratos ofrecidos en el exterior y las necesidades del mercado de trabajo español.

De la Vega ha insistido en que son los agentes sociales y económicos y las comunidades autónomas quienes diseñan el contingente, algo que, en su opinión, ha resultado "útil y eficaz. Así debe ser y así va a seguir siendo", aseguraba la vicepresidenta, tras reiterar que el Gobierno mantiene "exactamente la misma política de inmigración. Siempre ha acogido solidariamente a quienes legan a España legalmente, y así lo seguirá haciendo".