música

Dos generaciones y un concierto

La actuación de Hombres G y Melocos reúne a un público heterogéneo a los pies de la playa La Barrosa

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Las carreteras de acceso a La Barrosa vivieron ayer uno de los grandes colapsos del verano. El concierto que unió a varias generaciones creó mucha expectación desde las primeras horas de la tarde, registrando a media noche un lleno total en la explanada de la segunda pista. En el cartel, Hombres G y Melocos, dos grupos separados por más de 20 años, pero con algo en común: levantan las mismas pasiones entre sus grupos de fans.

En el público, de todo. De los jerséis sobre los hombros a las faldas imposibles; de los que llevaban carritos a los que escondían el botellón entre las piernas. Nuria Ángulo, de 14 años, vivía nerviosa los momentos previos al concierto. «De Melocos me sé todas las canciones, de Hombres G, sólo Sufre...», comentaba. Todo lo contrario que Antonio Ureba, que tirando del coche de capota recordaba los grandes éxitos del conjunto de los 80.

Fuera de Juego, un grupito de Chiclana, fue el telonero de la noche con relente. Sin hacer honor a su nombre, los chiclaneros estuvieron a un buen nivel con dos temas con frescura. Tras ellos, y con un aluvión de gritos, apareció sobre el escenario el conjunto portuense. «¡Cómo se nota que estamos en Cádiz!», dijo Jaime Terrón, la voz del grupo. Quizás lo diría porque en el césped del paseo marítimo se concentraban familias con las sillas de las playas, las neveras y algunas fiambreras. Algo muy típico de la zona. El culmen de su actuación llegó con la canción que, como ellos mismos señalaron, los ha hecho grandes: Cuando me vaya. El público cantó al unísono y con pasión.

Rozando las doce, Hombres G saltó a escena con un tema que auguraba que la noche no se había acabado con Melocos. Así pues, David Summers entonó las notas de Voy a pasármelo bien.

A las doce y pico, todavía había gente buscando aparcamiento. El concierto se acabó.