DETENIDO. Riccó ha sido expulsado de la ronda gala. / EFE
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Riccó da positivo con EPO de tercera generación y Saunier Duval abandona

En la crono de Cholet aparece en su orina una sustancia, hasta ahora, indetectable Machín decidió retirar el equipo que cesa en todas sus actividades

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El Tour de Francia vuelve a estar envuelto, de nuevo, en una espiral terrible, la del dopaje. Y esta vez le ha tocado a uno de los corredores importantes de la carrera, al que más espectáculo había dado hasta el momento. El italiano Riccardo Riccó ha sido controlado positivo en la contrarreloj de Cholet, con EPO de tercera generación, conocida como CERA. Es una EPO muy mejorada que parecía indetectable ante los controles ant-doping.

El corredor italiano fue detenido por la policía en la salida de la etapa, en Lavelenet, delante de todos los aficionados y de la caravana del Tour. Le comunicaron su positivo a las 12:40 del mediodía. Fue trasladado a una gendarmería de Lavelanet. Un médico de la Agencia Francesa de la lucha contra el Dopaje (AFPLD) le entregó un sobre en mano y le comunicó sus derechos, antes de que hiciese su irrupción la policía, que fue menos espectacular que en otras ocasiones para la detención. Unos metros delante del autobús le esperaba un coche.

Su equipo, Saunier Duval decidió no tomar la salida en la duodécima etapa, Lavelanet- Narbona. También retiraron el equipo que iba a correr en la Vuelta a Madrid, suspendiendo toda su actividad como grupo ciclista. La organización del Tour les ofreció la posibilidad de seguir en carrera, pero la escuadra cántabra, ante la gravedad de los hechos, la rechazó totalmente. El espectáculo resultó penoso puesto que hasta ahora, la policía había visitado los hoteles de los equipos, pero no las salidas y las llegadas de las etapas. En el Tour de 1998 se llevó a Lausana, a la sede de la UCI, donde estuvo una semana pasando controles, hasta que pudieron demostrar que su elevado hematocrito era natural.

Riccó cuenta con un certificado de la UCI, en el que se refleja esa anomalía.

En el caso del italiano, se dan además otras circunstancias especiales. Es un corredor que había cogido un gran carisma en el mundo del ciclismo, no sólo por la forma en la que lanzaba sus ataques, sino por su peculiar forma de ser, provocativa, anunciando dónde iba a ganar, dónde iba a atacar, criticando a sus compañeros, al igual que por su desmedida pasión con Marco Pantani.

Futuro en juego

Riccó es un corredor que estaba llamado a marcar una época en el mundo del ciclismo. Si para el escalador italiano, salvo que consiga demostrar lo contrario en los tribunales, su carrera puede darse por terminada, no va a ser mejor la situación de Saunier Duval. Al presunto positivo de Riccardo Riccó se une el que dio el año pasado, también en el Tour, Iban Mayo, que todavía está pendiente de resolución judicial. El futuro del equipo está en juego. Si la formación continua en activo van a tener problemas para volver al Tour, al menos con el mismo nombre y los mismos dirigentes.

Saunier Duval ha suspendido toda su actividad como equipo profesional por tiempo indefinido.