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El plan funcional del SAS sobre el nuevo hospital descartó una torre y optó por las ocho alturas

El informe previo al concurso aclaraba que el edificio tenía que ser «funcional, horizontal y sin excesiva dependencia vertical»

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El Servicio Andaluz de Salud (SAS) no tenía pensado que el nuevo hospital de Cádiz fuera una construcción en altura como recoge ahora una de las ofertas presentadas al concurso público para su diseño y dirección de obra. La consejera de Salud, María Jesús Montero, presentó a finales de diciembre de 2006 el plan funcional del futuro complejo hospitalario de Cádiz. Este documento no era otra cosa que la hoja de ruta que debía seguir la construcción del Hospital Regional Universitario de Cádiz para cubrir todas sus necesidades.

La consejera detalló entonces que la residencia contaría con 750 habitaciones individuales, 814 camas y 25 quirófanos. El plan funcional dejaba claro que el complejo ocuparía 113.075 metros cuadrados, 30.000 más que el actual Hospital Puerta del Mar. A ellos se sumarían otros 52.500 para aparcamientos y el helipuerto.

Este periódico ha podido saber que en esta misma documentación figuran además las características arquitectónicas que dictó el SAS para el nuevo hospital y descartó una construcción en altura. Según el documento al que ha tenido acceso LA VOZ, se pone de manifiesto que el resultado debe ser «un edificio eminentemente horizontal, sin excesiva dependencia de circulaciones verticales». La esencia del complejo hospitalario es su forma «racional y funcional».

La ficha urbanística

Estas directrices técnicas tienen también su eco en la ficha urbanística que ha elaborado Zona Franca, entidad que gestional el proyecto de nuevo hospital. En este documento también se deja claro que «se trata de una acción puntual en Extramuros cuyo objetivo principal es la construcción del nuevo hospital general de la ciudad». Entre los detalles que aparecen destaca que el inmueble contará «con una altura de ocho plantas pudiendo ocuparse la totalidad de la parcela, no exigiéndose separaciones a linderos».

La Mesa de Contratación de Zona Franca tiene que elegir ahora entre las dos ofertas que optan al concurso público para el diseño y dirección de obras del hospital. Sin embargo, las directrices marcadas por el SAS en su plan funcional chocan con el planteamiento que hace una de ellas. Así, los dos estudios de arquitectura que se han unido para hacerse con el citado concurso, Planho Consultores SL y Aidhos Arquitec SA, concentran la actividad hospitalaria en una torre de 20 plantas y proponen un edificio anexo para usos administrativos. Esta iniciativa, que ha sorprendido a propios y extraños, obligaría, de ser la definitiva, a introducir una modificación puntual del actual plan urbano de Cádiz, ya que el planeamiento vigente no contempla más de ocho alturas en la trama urbana.

La otra oferta que pugna por el concurso ha presentado un diseño horizontal. Se trata de una gran base con dos plantas de donde emergen dos bloques de seis alturas. Esta iniciativa la defienden siete arquitectos de tres estudios diferentes del país que han unido sus fuerzas para desarrollar el proyecto. Sus representantes han anunciado que impugnarán el concurso si gana la oferta contraria, ya que denuncian que no se atiene a las reglas del juego e incumple el actual PGOU de Cádiz.

La situación entorno al concurso se ha enconado y Zona Franca ha optado ahora por pedir informes técnicos, tanto legales como urbanísticos, para comprobar la viabilidad de la oferta que plantea una torre. La solicitud de esta documentación impide adjudicar el concurso a finales de este mes, como estaba previsto, y aplaza la decisión de la Mesa de Contratación hasta el próximo otoño

jrodriguez@lavozdigital.es