Imagen de archivo de Clara Rojas (d) y Consuelo Gonzalez de Perdomo. /AFP
perfil

Dos políticas unidas por un secuestro

Clara Rojas y Consuelo González, son sólo dos de las cerca de 3.000 personas que están retenidas en contra de su voluntad en Colombia

BOGOTÁ Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Clara Rojas y Consuelo González están unidas por la política y por ser víctimas de una tragedia que afecta a miles de sus compatriotas puesto que, en Colombia, hay más de 3.000 personas secuestradas por guerrilleros y la delincuencia común.

Clara Rojas, amiga y compañera de Betancourt

La abogada bogotana Clara Rojas, de 43 años, fue secuestrada el 23 de febrero de 2002 en una carretera del sureño departamento del Caquetá junto a la entonces candidata presidencial Íngrid Betancourt, de quien era compañera de candidatura por el Partido Verde Oxígeno para las elecciones de mayo de ese año.

El objetivo de los guerrilleros sólo era Betancourt, que también tiene nacionalidad francesa, y así se lo dijeron a Rojas, quien por solidaridad decidió quedarse junto a su amiga. Cinco meses después del secuestro, Rojas apareció al lado de Betancourt en un vídeo enviado por la guerrilla como primera prueba de la supervivencia de ambas.

De Clara Rojas sólo volvió a saberse en 2006, cuando el periodista Jorge Enrique Botero regresó de un campamento rebelde asegurando de que había procreado en cautividad a un niño, Emmanuel, de padre guerrillero. Éste aseguró que el bebé no fue fruto de una violación y que las condiciones del parto fueron verdaderamente extremas.

El nacimiento del niño fue confirmado en 2007 por el policía John Frank Pinchao, otro de los secuestrados por la guerrilla colombiana y que, en abril de ese año, consiguió escapar. Pinchao aseguró que el pequeño Emmanuel era un bebé "grande y sano".

Consuelo González una política con larga trayectoria

La misma esperanza expresaba la familia de Consuelo González de Perdomo, secuestrada el 10 de septiembre de 2001 en la carretera que comunica Pitalito, su población natal, con Neiva, la capital del departamento del Huila.

González, de 57 años, es una política del Partido Liberal con una larga trayectoria en cargos de elección popular en el Huila. Concejala de Pitalito, diputada regional y representante a la Cámara en dos períodos, el último de los cuales (1998-2002) no logró concluir por el secuestro.

Durante el cautiverio, la ex congresista, que tiene dos hijas, Patricia Helena y María Fernanda, enviudó y fue abuela. En sus seis años retenida, sus familiares tan sólo recibieron una prueba de supervivencia.