El paraíso es también ecológico

La Costa de la Luz ofrece interminables horas de sol, preciosas playas y ahora también conciencia verde. Los hoteles gaditanos buscan fórmulas para reducir el gasto energético, un ahorro para el medioambiente y el bolsillo de las empresas, que han sufrido como la demás los estragos de la crisis. El sector vive en una constante evolución dada la durísima competencia y no está dispuesto a perder al carrera ahora que comienza una senda de crecimiento. Las medidas de ahorro eléctrico han supuesto un alivio a la factura general y ofrecen ese plus añadido que muchos clientes van buscando.

El Hotel Atlántico, en Cádiz, ya abrió sus puertas en 2012 con esa vocación ecológica, convirtiéndose en el principal ejemplo de eficiencia de Paradores de España.

Explica su director, Eduardo Oriola, que en su construcción «se instalaron los sistemas más avanzados para el aprovechamiento de la energía y de los recursos naturales».

El edificio dispone de placas solares en distintas zonas como la fachada de las habitaciones o el sótano, que permiten el autoabastecimiento y, con él, una reducción del consumo energético muy importante.

La climatización y la ventilación también se han optimizado con elementos que no tienen coste energético ya que van variando según la posición del sol y la velocidad del viento, dos recursos naturales que son muy generosos en la capital gaditana.

Todo está gestionado mediante un control informático central. Ese mismo criterio se ha mantenido para reducir el consumo de energía para la caldera central con la instalación de cogeneradores de ACS, así como de una enfriadora de agua con recuperador de calor para las instalaciones climatizadas como el SPA.

Otra de las cadenas que ha realizado un esfuerzo en estos años por la reducción del consumo es Hipotels, que cuenta con dos establecimientos de referencia en Chiclana y Conil.

La cadena instaló en su hotel de La Barrosa un sistema para ahorrar en combustible de la caldera. La iniciativa tuvo una repercusión inmediata en el coste de explotación de cada cama vendida, puesto que se consigue un mejor precio por tener menos gastos de producción. Para la compañía supuso un ahorro diario de 200 litros de combustible, lo que permite rebajar la factura anual hasta un 20%, es decir, la quinta parte del coste total anterior.

Cada vez más adeptos

De igual manera, el grupo Hoteles Andaluces con Encanto (HACE), ha llevado a cabo una fuerte apuesta por la sostenibilidad energética, que ha sido reconocida con premios internacionales. El último ha sido concedido este mismo año. Se tarta de la certificación Travelife Gold, con la que se ha distinguido a sus dos célebres establecimientos de Rota: Duque de Nájera y el Playa de la Luz.

Entre las medidas que se han valorado para ello se encuentra el uso de energías renovables y la instalación de iluminación de bajo consumo, así como el aprovechamiento de la luz natural y la optimización de servicios como el aire acondicionado, con apagado y regulación de temperaturas automáticos. También una gestión de residuos responsables, con menos producción y más aprovechamiento, así como el ahorro de agua que ya realiza prácticamente todo el sector, incluidos los alojamientos más pequeños.