La calle Nueva cuenta con un importante tránsito de personas
La calle Nueva cuenta con un importante tránsito de personas - francis jiménez
hostelería

La metamorfosis de la calle Nueva de Cádiz

La céntrica vía, vinculada al ámbito bancario y paso habitual de los turistas que visitan la ciudad, está cambiando su fisonomía con la apuesta por la hostelería

raúl jiménez
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El casco antiguo de Cádiz ha contado históricamente con una zona destinada al establecimiento de entidades bancarias: la calle San Francisco y su unión con Nueva hasta la desembocadura en la plaza de san Juan de Dios. Numerosas sucursales minan estas vías de la ciudad, siempre vinculadas al ámbito financiero y bursátil.

Resulta paradójico que esta área, colindante con el epicentro comercial y turístico de la ciudad, haya sido casi exclusivamente asentamiento de bancos y cajas de ahorros y que el sector hostelero apenas haya apostado por la apertura de nuevos comercios, una tendencia que está cambiando visiblemente desde el arranque de 2015.

Cierto es que la calle San Francisco cuenta con más de un establecimiento de esta tipología a lo largo de su extensión, habiendo existido bastante movimiento en los últimos tiempos con la apertura de nuevas cafeterías y bares o el cambio de propietario en otros ya asentados en la zona.

Pero llama especialmente la atención la metamorfosis que está sufriedo la calle Nueva. Una vía pequeña que tiene hipotecada una de sus bandas a la presencia de entidades financieras y que en la otra, esta sí, cuenta con locales en los que se ha apostado, definitivamente, por la hostelería.

Hace apenas dos años no existía cafetería alguna en Nueva. La apertura por parte de los hermanos Manuel y Alfonso Cózar del Nuevo Novelty en agosto de 2013, situada en la esquina con la plaza de San Juan de Dios, coincidía en el tiempo con el cierre de un clásico gaditano como la Marisquería Joselito, que permaneció casi 40 años abierta al público.

Esos fueron los últimos coletazos del sector hostelero que se recordaban en la zona hasta el pasado mes de diciembre, cuando la empresa Tiendas Díaz SL, poseedora del horno La Palma de Cádiz, decidía dar uso como cafetería a un local que había adquirido años antes y que mantenía cerrado.

La terraza que han instalado los propietarios del Bar Cafetería Pepín justo en mitad de la calle ya ha cambiado notablemente la fisonomía de la misma, donde se respira otro aire más cercano y acogedor para el caminante.

Apenas dos meses después de esta apertura, en el antiguo local de la Marisquería Joselito, en la esquina con Cristóbal Colón, Nino Ordóñez apostaba por la Marquesa de la Huevas, local de tapas especializado en la preparación de esta apreciada parte del pescado.

El conocido empresario gaditano, propietario del restaurante El Español y la Pizzería Nino’s, es otro de los muchos a los que no ha escapado que la cercanía del puerto de Cádiz y el auge del turismo de cruceros convierten a su esquina en paso habitual de cientos de visitantes.

«Todo el mundo es consciente del potencial que existe en esta zona del casco antiguo con el aumento de la llegada de cruceristas», explica Nino, que señala que no sólo esta situación ha pesado a la hora de elegir el local, sino también otro aspecto más sentimental: «En esta misma calle Nueva, donde ahora se encuentra la oficina de Turismo, la familia de mi padre tenía el recordado Restaurante Cafetería El Español, por lo que también se convierte en un lugar entrañable para mí».

Y la tendencia sigue en auge, pues en los próximos días abrirá en el local de la antigua Banca March la cafetería y panadería La Vaca Atada, al frente de la cual se encuentra Javier Senese, argentino natural de Mar del Plata afincado en Cádiz desde hace un año.

«He recorrido el casco antiguo de la ciudad durante más de dos meses buscando emplazamiento para el negocio y he podido comprobar que justo esta calle es una de las que cuenta con más tránsito de personas por minuto», explica Javier, que ofrecerá a gaditanos y visitantes especialidades de su tierra natal como el dulce de leche, el sandwich de miga o las conocidas empanadas argentinas. Pendiente de las licencias de apertura y de colocación de terraza, su local dará otra vuelta de tuerca a la vía. Calle Nueva, cara nueva.

El precio del alquiler

Nueva no puede considerarse una calle barata a la hora de encarar la compra o el alquiler de un local. Aunque también es cierto que no es de las vías más cotizadas del centro de la ciudad para abrir un negocio. Ni siquiera aparecería en un hipotético 'top-ten' de las más valoradas para tener un establecimiento.

Actualmente los precios de los locales de esta vía rondan los 1.800 euros por metro cuadrado, para la compra, y los 20 euros por metro cuadrado en lo que se refiere al alquiler. Unas cantidades por las que los empresarios, sobre todo si son particulares, deben pensarselo dos veces antes de realizar una inversión.

No obstante, todo dependerá de en qué lugar del Centro pongamos los pies para que estas cifras lleguen a parecernos moderadamente razonables, pues vías tan transitadas como Columela, Novena, San Francisco, Compañía y Ancha son las que actualmente se convierten -por este orden- en las más caras del centro de Cádiz.

Para hacernos una idea, el tramo de la calle Columela que va desde el cruce con San Francisco hasta la plaza del Palillero, puede considerarse la ‘milla de oro comercial’ de la ciudad. En este trecho, el precio de los alquileres de locales rondan los 70 euros por metro cuadrado, mientras que para la compra se elevan hasta los 6.000 euros el metro cuadrado, cantidades a las que tan sólo pueden acceder las grandes franquicias.

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