Una mesa electoral del Cerro del Moro cerró con tensión el 24M

La jornada electoral del pasado domingo dio para mucho más que la fiesta en la calle y las caras tristes en los despachos. Ya desde mucho antes el día comenzaba de forma atropellada en uno de los centros de votación de la capital, donde hubo incluso la presencia policial, que resultó exagerada para unos y necesaria para otros. La tensión creció desde primera hora de la mañana entre Ana Camelo, que ocupa el puesto seis de la candidatura Por Cádiz sí se puede y Ángeles Ferrer, número 26 de la lista del PSOE, cuando ambas ejercían como interventoras en la sede de la Asociación de Vecinos del Cerro del Moro.

Fue durante la tarde cuando la representante socialista consideró que Camelo estaba incitando a una de las votantes que se acercó hasta la mesa electoral y llegó a interponer una denuncia que, posiblemente, se resolverá ahoy.

Según explicó Ferrer a este medio, la actitud de la representante de Por Cádiz sí se puede fue de «avasallar» y aseguró haber sido testigo de cómo le señalaba a una persona mayor cuál era la papeleta de su partido. «Me quedé en el pasillo y la oí decir que esa era la papeleta, entonces fue cuando le dije que lo que estaba haciendo era un delito», dijo. Después tomó la decisión de comunicarlo a la presidenta de la mesa y llamar a la Policía Nacional para cursar formalmente la denuncia.

Fue poco después cuando se presentaron en la asociación de vecinos varias patrullas para poner orden. «No sé cuáles pueden ser las consecuencias, pero mi deber es denunciar lo que considere que incumple la ley», aseguró.De la misma forma, insistió en que fue testigo de ese hecho, pero «ya desde antes había visto muestras de que estaba incitando al voto».

Por su parte, Ana Camelo quiso dejar claro que «en ningún momento» hizo nada para influir en los votantes y recordó que «no es la primera vez que participa en unos comicios». Sobre el motivo de la denuncia, consideró que «ha sido mal interpretado» y lo explicó de esta manera: «llegó una señora mayor que hacía tiempo que no votaba y la había mandado su hijo, se acercó a mí y me preguntó si era era la papeleta de nuestra candidatura y la ayudé, entonces se vino ella para mí como una energúmena y me dijo que estaba incitando al voto». La representante de Por Cádiz sí se puede relató que luego fue a tomar un café y cuando volvió se encontró con varios coches de Policía Nacional, lo que le pareció «desproporcionado». «Ahora dice incluso que la he insultado y eso no es cierto», insistió, además de asegurar que tomará acciones legales si ese incidente va a más.

Camelo lamentó la campaña de descrédito que dice estar sufriendo y señaló que ni ella ni su formación «tienen ningún tipo de necesidad de incitar o dar este tipo de espectáculos».