Una treintena de directores se reunieron el miércoles en la escuela Marionetas de Chiclana
Una treintena de directores se reunieron el miércoles en la escuela Marionetas de Chiclana - F. JIMÉNEZ
Cádiz

Las guarderías gaditanas denuncian estar asfixiadas por los retrasos de la Junta

La asamblea que agrupa a decenas de centros de toda la provincia reclama un nuevo convenio e informará a los padres de posibles medidas de presión

Antonio M. de la vega
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Los centros de Educación Infantil de 0 a 3 años de la provincia de Cádiz se sienten «condenados» por los impagos y constantes retrasos de la Junta de Andalucía. Desde que empezó el curso, estos centros acumulan la deuda de la compensatoria del mes de agosto y la liquidación del mes de septiembre (con la que cuentan como base para el inicio de curso). Esto hace que la situación sea ya insostenible.

En algunos centros los educadores están trabajando sin cobrar. En otros se está recurriendo a préstamos bancarios para poder hacer frente a los pagos. Explican los directores de los centros que los retrasos son la norma desde hace varios años.

Los profesionales se sienten «completamente ninguneados

«El acuerdo de concierto que tenemos con la Junta de Andalucía recoge que el pago se realiza en el plazo de un mes a contar desde la fecha en que preste su conformidad a las mismas.

El problema es que siempre esperan al último día para no incurrir en incumplimientos», se quejan.

La sensación que tienen estos profesionales es la de sentirse «completamente ninguneados. Nos dicen que si no estamos de acuerdo con las condiciones nos podemos salir del convenio».

Eso es justo lo que reclama este colectivo que no se circunscribe solo a la provincia de Cádiz, un cambio en las condiciones de ese convenio. En toda Andalucía se están produciendo movilizaciones. El pasado miércoles se reunieron en asambleas en cada territorio para acordar actuaciones conjuntas, porque eso lo tienen claro, «sabemos que esto va para largo y no va a ser una batalla particular, sino que vamos a actuar en bloque», dicen.

La asamblea de Cádiz seguirá reuniéndose. Aún no se ha llegado a un consenso sobre las medidas a llevar a cabo. Pero sí hay acuerdo en que lo primero que hay que hacer es informar a los padres. «Las subvenciones que entrega la Junta son para los alumnos. Sus padres firman con la matrícula que tienen una ayuda para once meses, que será mayor o menor dependiendo de la renta familiar. Pero lo que no saben es que ese dinero no ha entrado y que estamos trabajando solo con la parte que ellos nos pagan».

Otro de los aspectos que «ahogan» a estos centros es la obligación de pagar en tiempo y forma a la Seguridad Social por cada uno de sus trabajadores, con un recargo del 20% cada vez que se pasan de plazo. «Nos exigen más nunca, y sabemos que tenemos que cumplir, pero al mismo tiempo es la propia administración la que no está cumpliendo con nosotros», se quejan.

La directora de la Escuela Infantil El Patio de Zona Franca, Purificación Mendiguchía, explica que en su caso, el centro está trabajando desde hace meses «con un tercio de los ingresos que teníamos comprometidos». Eso sin contar con que cada vez son más las familias con necesidades económicas que están siendo bonificadas al cien por cien, por lo que tampoco se puede contar con ningún ingreso que venga de las mismas.

En este caso concreto, los trabajadores de la escuela han convocado a los padres a una reunión el próximo martes en la que se les va a poner al tanto de la situación y se les va a solicitar apoyo ante la posibilidad de que tengan que adoptar medidas de presión más contundentes.

En la provincia de Sevilla unas 60 guarderías han decidido dejar de prestar desde el lunes el servicio de comedor. «Aquí no lo vamos a hacer de momento porque aparte de fallarle a las familias le causaríamos un perjuicio muy importante a las empresas de catering, que en muchos casos también están prestando su servicio sin cobrar», comentan.

A este malestar se une otro que viene también de largo, y es el que se deriva de la «discriminación» que dicen sufrir los trabajadores de estos centros concertados con respecto a los de la Junta de Andalucía «en cuanto a horarios, calendario escolar, sueldo. Son muchas cosas, y nos dicen que es porque somos centros privados, cuando la realidad es que estamos subvencionados al cien por cien y no nos dejan tener plazas privadas». Por todo ello consideran que seguir con el convenio actual «es una condena más que una ayuda».

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