TRES MIL AÑOS Y UN DÍA

LOS PARADOS SE REFUGIAN EN FACEBOOK

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165.303. Esa es la cota de paro registrado en la provincia de Cádiz durante el pasado mes de mayo. Cierto es que baja por tercer mes consecutivo, pero todavía constituyen una gran ciudad, con un censo similar a San Fernando o Chiclana. A menudo, se quedan en cifras, pero detrás de cada uno de esos dígitos se oculta una historia, una angustia, una esperanza y un sinvivir que no suelen aparecer en las estadísticas.

Más de cuatro millones de parados en España, aunque la abultada economía sumergida de nuestro país quizá esconda empleos en la sombra, curros clandestinos con sueldos en precario y ningún tipo de garantías. Ayer sábado, a mediodía, el grupo Bahía de Cádiz de Amnistía Internacional se instaló en la plaza del Palillero de la capital gaditana en lucha contra la pobreza y por los derechos humanos, que una cosa suele quitar la otra. También pretendían que, a pesar de la crisis, se cumplieran los objetivos del milenio, aquella hoja de ruta fijada hace diez años y que no parece alcanzar hasta ahora grandes éxitos precisamente. Lo que pretendía Amnistía era juntar firmas para pedir al presidente del Gobierno que impulse una posición común de la Unión Europea en Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) que reconozca expresamente el vínculo entre los Derechos Humanos y la lucha contra la pobreza. Las personas interesadas en conocer los ODM tendrán información y podrán firmar para mostrar su apoyo a la iniciativa que AI propone con ocasión de la presidencia española de la Unión Europea. Dudoso éxito tendrán cuando los distintos países europeos, empezando por el nuestro, andan demasiado ocupados recortando el estado del bienestar como para trazar ahora nuevas fronteras entre la dignidad y sus contrarios.

No muy lejos de donde Amnistía instaló su mesa petitoria, en la calle Sagasta, se alza la iglesia de San Lorenzo, en donde la plataforma de parados decidió encerrarse, hace ya casi dos meses, un 19 de abril. Eran veinticuatro pero quedan veinte. Algunos se han ido dando de baja de esta iniciativa, sobre todo si se tiene en cuenta que durante las acciones que antes llevaron a cabo en San Juan de Dios, sumaron más de treinta. Sin embargo, otros persisten en ella y no están dispuestos a rendirse: «El principal problema es el tiempo que le quitamos a nuestras familias. Llevamos demasiado tiempo y a veces la situación se hace difícil», explica uno de ellos. Sus edades oscilan en torno a los cuarenta años y en su mayoría proceden del sector de la construcción -albañiles, ferrallistas, soleadores, encofradores-, aunque también hay algún carpintero y un electricista. El viernes, se pusieron a ver el reportaje que les dedicó el programa 'Callejeros'.

Saben que no están solos, que en otras poblaciones de la Bahía, como Puerto Real, también funcionan plataformas similares. Quieren llevarle la contraria a Ignacio Espeleta y demostrar que son trabajadores a pesar de ser de Cádiz. A pesar de llevar algunos en el paro ocho meses y otros tres años -dos años de promedio-: doce de ellos ya no reciben nada y dos están cobrando el subsidio de desempleo. El resto, ese complemento que llaman PRODI o la simple ayuda familiar.

«La Iglesia y los feligreses nos están dando mucho apoyo -explica Dani, uno de los encerrados-. Hemos pedido reunirnos con todas las instituciones, pero hasta ahora sólo nos ha recibido el Ayuntamiento y los sindicatos. El PSOE de Cádiz y algunos de sus concejales también han venido a vernos, a orientarnos y a informarnos, pero hemos enviado seis solicitudes al delegado deEmpleo y no nos ha contestado a ninguna». Tampoco otras instituciones les tienen en cuenta. Al menos, a través de la Delegación municipal de Fomento, han descubierto que tenían datos erróneos en su inscripción en el Servicio Andaluz de Empleo, o que faltaban requisitos. Ya les han creado un Itinerario de Inserción Laboral y ahora esperan que dé frutos: «Los más necesitados reciben ayuda directa de Cáritas. El resto de la familia, los amigos, nos van arrimando cosas. El Faro nos trae la comida los domingos. También el bar Casa Pepe nos ayuda mucho y el quiosco de churros de La Guapa. La verdad es que la gente se ha volcado». Ojalá se volcasen también los poderosos. Pero, ¿cómo hacerlo al unísono con una ciudad de 165.303 personas sin curro? A inventiva, eso sí, no les gana nadie. Cuentan con un correo electrónico: plataformadeparados_2010@hotmail.com e incluso se les puede localizar en facebook a través del epígrafe Parados Cádiz Capital. Por supuesto, que no desdeñan las octavillas y los carteles, facilitados gratuitamente por una copistería. Una academia de idiomas se los ha traducido al inglés y al alemán: «To the people of Cádiz», empiezan diciendo. Para que después digan que los gaditanos no sabemos expresarnos en otras lenguas.