Cada vez son menos las parejas que aplazan su fecha la boda y más las que la adaptan
Sin embargo, el 50% de ellas optan por aplazarla, esperanto poder organizar la boda que siempre soñaron
La pandemia ha castigado a varios sectores en todo el mundo, especialmente al de los eventos, incluyendo las bodas. Ahora que toda la sociedad vuelve a retomar sus rutinas, las parejas comprometidas y los profesionales de las bodas también se van adaptando a la nueva normalidad poco a poco. Bodas.net, y el resto de portales que forman parte del grupo The Knot Worldwide, han lanzado un Informe Global sobre el impacto del COVID 19 en las bodas que recoge las respuestas de cerca de 10.000 parejas de 15 países con bodas programadas de septiembre 2020 a enero 2021, y lo compara con los datos obtenidos en los estudios periódicos realizados desde marzo de este año, cuando empezó la pandemia. Uno de los datos más significativos que muestra este estudio es que cada vez son menos las parejas que optan por aplazar la fecha de la boda y más las que deciden celebrar la ceremonia adaptándolas para cumplir con las medidas recomendadas, dentro de las posibilidades normativas del momento.
El 41% de las parejas encuestadas a nivel mundial a mediados de septiembre dijeron que no tenían pensado cambiar la fecha de su boda por el momento. La respuesta a esta misma pregunta en el mes de abril fue del 13%. En el caso de España la cifra aumenta ligeramente hasta el 44%. Una cifra esperanzadora comparada con el 11% que respondió a la misma pregunta en abril y el 28% en mayo. No obstante en el resto de países de Europa, estas cifras son aún más positivas: el 61% dijo que no tiene intención de posponer el compromiso en Italia y el 58% en Portugal. En los EE.UU., de los portales «The Knot» y «WeddingWire», el 58% de las parejas dicen que no harán cambios en la fecha.
A pesar de este dato, el número de parejas que decide aplazar su boda sigue siendo mayoritario, con un 50% de promedio global. Afortunadamente para el sector, esta cifra está 19 puntos por debajo de la cifra en abril. Además, el ratio de parejas que deciden cancelar se mantiene bajo y prácticamente igual desde el inicio de la pandemia, con un 9% de promedio global y en Europa tan solo con un 5%.
Preocupados por el covid
En todos los países, la principal razón por la que las parejas dicen que posponen es porque están «preocupadas por la duración de COVID-19».
La mayoría de las bodas que se están posponiendo lo hacen para el 2021, son pocos los que aplazan a 2022 (promedio mundial: 3%). Actualmente los profesionales tienen sus agendas prácticamente llenas para el 2021 y las parejas que se comprometen actualmente tienen que pensar en viernes, domingo, días entre semana o si no, lo más habitual, en fechas del 2022 en adelante. Esto supone que los tiempos de organización, que normalmente estaban entre 12 meses en Europa y 18 meses en USA están ampliándose a los 18 o incluso 24 meses.
Las parejas que aplazan lo hacen esperando que el cambio de fecha les permita tener la boda que siempre imaginaron y el 80% a nivel global dice que no planea recortar su presupuesto ni que tampoco contratará menos servicios y profesionales (87%).
Por otro lado, muchas parejas optan por casarse legalmente y aplazar la celebración «grande» para más adelante. Este fenómeno de la «doble celebración» se está dando mayoritariamente en EE.UU. (56%), Chile (42%) y Canadá (39%). En los EE.UU., muchas parejas realizan una pequeña celebración o «minimonia» junto a sus seres queridos antes de su celebración y la gran mayoría (83%) dice que contratará a uno o más de los profesionales de su boda para este mini evento. En España, la cifra de parejas que optan por esta modalidad es algo más reducida (27%) pero todavía una cantidad considerable.
Las nuevas bodas
La COVID-19 ha afectado a los países de diferente manera y por ello, las medidas puestas en marcha por cada gobierno han sido muy distintas. El sector nupcial se está teniendo que adaptar en cada país, región, comunidad o incluso pueblo de una manera diferente. En los lugares donde el aislamiento total ha finalizado y ya se está viviendo en lo que se conoce como la «nueva normalidad», podemos identificar un aumento de las celebraciones nupciales adaptadas a las medidas y cumpliendo con las exigencias de seguridad.
En todos los países, la gran mayoría de las parejas son proactivas al
incorporar medidas de salud y seguridad (83% promedio mundial) para asegurar el bienestar tanto de la pareja como de los invitados. Muchos están optando por proporcionar gel hidroalcohólico y mascarillas, aunque también están adoptando medidas más creativas, como que los invitados lleven pulseras con códigos de colores que indiquen su nivel de comodidad al interactuar con otras personas en el evento.
Hacer ajustes en la organización de mesas o trasladar la celebración a espacios exteriores es otra de las medidas que también es tenida muy en cuenta, especialmente en Canadá (72%), USA (67%) e Italia (63%). Y como no podía ser de otra manera en plena era digital, el 41% de las parejas a nivel mundial dice que aumentará la comunicación con sus invitados para anticipar y resolver sus dudas. En España, este dato es ligeramente superior con un 48%.
Daniel y Vanessa son una pareja que se casó el pasado 5 de septiembre en Tarragona y debido a la prohibición de bailar impuesta por las Comunidades en nuestro país, tuvieron que ser creativos también para adaptar la animación de su boda para que los invitados lo pasaran igualmente bien: «Después de que el Covid nos obligase a aplazar una vez, y nos tuviese hasta el último minuto con la incertidumbre de si podíamos o no celebrarla, ¡por fin llegó nuestro día! Después de una larga espera, lo disfrutamos como los que más, nos reímos y compartimos el día con nuestros seres queridos y, aunque no se pudo bailar, contamos con un monólogo, mago y fotomatón, que hicieron la fiesta aún más divertida de lo que era. Sin duda, y vuelvo a repetirlo, el mejor día de nuestras vidas», comentó Vanessa en el portal Bodas.net.
Noticias relacionadas
