El socialista Juan Cornejo tiene dos viviendas y una cuenta corriente saneada

La declaración de los senadores resulta bastante parecida. Todos tienen más de una propiedad inmobiliaria a su nombre y cuentas saneadas. Uno de los más conocidos es Juan María Cornejo, que declara dos pisos y dos plazas de aparcamiento en la provincia. También un trastero, todo comprado en régimen de gananciales.

Por ellos tiene dos hipotecas pendientes de las que apenas le queda por pagar 50.502 euros, algo menos de lo que tiene en su cuenta corriente.

El salario de los senadores está definido también en base a unas tablas salariales que están publicadas en la web de la Cámara. Perciben 2.813,91 euros mensuales en 14 pagas, más los complementos que correspondan en función del cargo que ocupe o la procedencia.

María Jesús Castro, declara dos viviendas en San Fernando y un local comercial, todo valorado en 246.357 euros. La senadora tiene también 1660 acciones de Banca Cívica, de las que no ha especificado su valor y un plan de pensiones. Sobre sus propiedades inmobiliarias pesan aún las hipotecas que saca adelante con su sueldo y una pensión de viudedad de 8.540 euros anuales.

José Carracao, el senador del Campo de Gibraltar, tiene dos viviendas, una en Jimena y otra en Manilva y declara una finca heredada de 32.000 metros cuadrados también en Jimena. Carracao es quizá el senador con mejor cuenta corriente con 146.859 euros y un fondo de pensiones de 87.157 euros, según su declaración. El socialista no declara otra actividad aparte de su labor en la Cámara.

Otro de los que mayor patrimonio declara es Fernando García Navarro, que tiene una vivienda a su nombre y el 50% de un local comercial. El senador tiene también un 25% de una casa en Bornos y la misma participación en una parcela de 3,14 hectáreas de secano en la localidad serrana, ambos procedentes de una herencia. García Navarro le hace frente también a varios préstamos, pero todos de escaso valor sin llegar a superar los 16.000 euros.