ANDALUCÍA

Las consultas sobre la cláusula suelo de las hipotecas se quintuplican en un mes

SEVILLA Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El teléfono de atención al consumidor de la Consejería de Salud multiplicó por cinco en febrero las llamadas pidiendo información sobre las cláusulas suelo que fijan muchas entidades bancarias en sus préstamos hipotecarios, de forma que tras las últimas decisiones judiciales sobre este tipo de cláusulas, «se ha pasado de las ocho llamadas recibidas en noviembre, diciembre y enero a las 39 registradas en febrero».

La Junta destaca que los teleoperadores que trabajan en este servicio de atención telefónica cuentan con la formación necesaria para asesorar sobre las condiciones y la normativa que rige la aplicación de estos límites a los tipos de interés de determinadas hipotecas.

Asimismo, Consumo informó a los clientes de las entidades bancarias BBVA, Caixa Galicia y Cajamar, tras la ejecución provisional de la sentencia dictada por el Juzgado de lo Mercantil número dos de Sevilla que las obliga a anular las cláusulas suelo por abusivas, de que no tendrán que acudir a sus sucursales «ya que el fallo es de obligado cumplimiento y debe aplicarse de manera automática a todos los afectados sin necesidad de personarse en el banco».

Estas tres entidades no podrán incluir las cláusulas suelo en sus hipotecas a partir de ahora y disponen de dos meses para eliminarlas de los contratos ya firmados, un plazo que expira el próximo 24 de abril, de forma que deben hacerlo así aunque hayan presentado un recurso de apelación y la resolución definitiva del proceso se alargue. La Junta indica en una nota que los clientes que tengan contratados sus prestamos hipotecarios con esas entidades verán reducidas sus cuotas mensuales según dicte el euríbor, «pero sin embargo, la sentencia no implica indemnización ya que el demandante, la Asociación de Usuarios de Banca, Ausbanc, sólo pretendía que las cláusulas suelo se declararan nulas y dejaran de aplicarse».

La cláusula suelo fija un límite mínimo del porcentaje de intereses que debe pagar el titular de un préstamo hipotecario, lo que ha evitado que muchos usuarios se hayan beneficiado de la bajada del euríbor, el principal índice de referencia de las hipotecas.