GOROSITISMO POSITIVO

La Catedral es un escenario ideal para demostrarle al fútbol español que el Xerez CD aún no está muerto. No vamos al primer templo del fútbol español a recibir la extremaunción, la idea de los de Gorosito y la de la afición azulina es la de conseguir una victoria que nos eleve a los altares y que mejor sitio para eso que una catedral.

En la búsqueda de un rayo de luz que nos invite a la esperanza, el entrenador argentino del equipo azulino va a apostar por un once inicial con moreno en el doble pivote con Keita y con Víctor Sánchez. El jugador procedente del FC Barcelona ha pasado del ostracismo, al que lo tenía relegado el Cuco Ziganda, a jugador importante. El efecto Gorosito ha fortalecido a la plantilla y a la afición. Se están reverdeciendo viejos laureles y el ambiente parece mucho más positivo tras la consecución de los tres puntos ante los pupilos de Goyo Manzano. El simple hecho de hacer dos cambios para ir a por el partido tras ponerse por delante el conjunto balear ha dado más confianza al aficionado azulino que cualquier acto de Ziganda.

En toda esta vorágine de positivismo, el que si que ha fallado un ápice ha sido el presidente, Federico Souza. Su afirmación: «La plata no es problema» choca un poco con el hecho de que a la hora de reforzar al equipo se haya gastado menos que un bastón por medio o que el pasamanos de un noveno. Llama la atención también, por otro lado, que Alustiza y Vigneri, dos auténticos desconocidos, de los que se espera lo mejor, claro está, hayan costado casi un millón de euros por cuatro meses. No sé yo.

Volviendo a las loas y a lo positivo, mi más sincero aplauso para el grupo de colaboradores que ha traído consigo el Pipo Gorosito. Esta semana he estado viendo los entrenamientos del equipo y trabajan destajo. Están llenándole el tanque de gasolina a los jugadores azulinos a marchas forzadas. Da gusto verlos en acción.

El de Bilbao tiene que ser el envite que nos catapulte y que signifique un punto de inflexión en el devenir de los intereses y designios xerecistas. Si ganamos esta tarde, la borrachera será de campeonato.

Los equipos que pululan por el sótano clasificatorio se van a asustar cuando nuestro aliento les esté dando en el cogote. Se van a poner más nerviosos que un vampiro cuando sale el sol. Si ganamos, que es lo que va a pasar, la zona baja de la tabla se va a poner más caliente que el queso de un San Jacobo. Más calentita que los labios de un dragón. En cambio, si perdemos en La Catedral, los ánimos se nos van a quedar a la altura de un bordillo y el Gorositismo Positivo pasará a mejor vida. Perder esta tarde sería igual que comerse un huevo frito sin pan. Sería igual que perder jugando al solitario. Sería como si se acaba el butano cuando te estás enjuagando en la ducha. Pero bueno, eso mejor ni lo pensamos. Sin más, amigos y xerecistas todos, espero que pasen todos una tarde magnífica.

¡¡¡Aúpa Xerez, Gora Jerez!!! A por ellos caramba. Convirtamos a los leones en mininos indefensos.