Foto y vídeo: Óscar Chamorro

Doble desagravio a 'La Mercedes'

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

A las ocho de la mañana del 5 de octubre de 1804 la armada británica asalta en aguas atlánticas, al sur de Portugal, a una flota de cuatro embarcaciones española que regresa de Montevideo. Sin previo aviso y en tiempo de la frágil paz de Amiens, cañonean a las fragatas 'Fama', 'Medea', 'Clara' y 'Mercedes'. Una bala de cañón británico alcanza la santabárbara de la nao 'Nuestra señora de las Mercedes', que estalla en una bola de fuego y muerte hundiéndose en instantes. El naufragio siega casi 300 vidas, mutila decenas y arroja a las profundidades del océano el preciado cargamento del navío-banco que comandaba José Bustamante: casi 900.000 reales de oro y plata en medio millón de piezas.

203 años después los cazatesoros de 'Odyssey Marine' expolian el pecio, arramblan con el tesoro y profanan el reposo de las 275 víctimas identificadas del naufragio, entre ellos 11 niños. Los insaciables mercenarios del mar se llevan a Florida 14 toneladas de monedas que el Estado español lograría recuperar en 2012, tras un largo y duro proceso judicial que recocía la mala fe de los 'piratas' norteamericanos.

Ahora los museo Naval y Arqueológico, junto con la sociedad pública Acción Cultura Española (ACE/E), reconstruyen la época y el 'Último viaje de la fragataMercedes' en una exposición excepcional desdoblada en dos didácticas y atractivas propuestas en las que cada museo pone el acento en el aspecto que le compete en torno al trágico evento y la recuperación del tesoro. Se puede ver parte de tesoro rescatado, 14 toneladas de monedas, casi medio millón de piezas que sumaban 900,000 reales, y 362 piezas de oro que el Estado español salvo de la rapiña de 'Odyssey'. Pero también comprender la relación geoestratégica y de fuerzas de la época, el poderío naval de las potencias europeas, la capacidad de su industria naval y militar, la actitud de la Corona española que declaró la guerra a la británica tras el asalto, comprender cómo se navegaba y calibrar la situación del yacimiento arqueológico expoliado y violado por la empresa norteamericana sin permiso y con alevosía.

Príncipes

Subtitulada 'La razón frente al expolio. Un tesoro cultural recuperado', la exposición que inauguran este jueves los Príncipes de Asturias, «es la historia de dos agravios y de un gran éxito judicial» según resumen las comisarias de muestra doble: Carmen Marcos Alonso, por el Museo Arqueológico, que estrena con la exhibición la brillante remodelación de sus salas temporales, y Susana García Ramírez por el Museo Naval, cuya joya es un maqueta de la 'La Mercedes' hecha con los mismos materiales que la original en la que ha trabaja más de dos años el equipo del experto Miguel Sánchez Godoy. La original fue construida en la Habana y botada el 15 de noviembre de 1788 con 44 '85 metros de eslora y 11,53 de manga. El día de su naufragio llevaba a bordo a 323 personas de las que apenas 50 serían rescatadas con vida.

«El relato histórico es lo que da valor a las monedas, porque narramos la victoria de la cultura frente al dinero» dicen los responsable de la selección. Junto al tesoro numismático exhiben más de dos centenares de piezas originales, entre restos del buque, del cargamento, pertenencias y objetos personales del pasaje hallados a mas de 1.000 metros de profundidad y una batería de audiovisuales que explican en detalle lo acaecido en estos dos siglo y el «brutal destrozo de los expoliadores en el yacimiento».

En un «extenso, riguroso y didáctico» recorrido se pone el acento en la importancia de la protección del patrimonio subacuático, y en «la recuperación de un tesoro cultural cuyo valor trasciende con mucho el peso de la plata o el oro que contiene, así como dar a conocer los detalles del expolio».

Hay en el Arqueológico documentos históricos y pinturas muy notables, como los retratos de Carlos IV y María Luisa de Parma pintados por Goya o el de Godoy obra de Carnicero, y otros objetos se pueden contemplar en los 600 metros cuadrados que ocupa la muestra en el museo recién remodelado. Los siete ámbitos en los que Carmen Marcos ha dividido el recorrido crean un relato que comienza con una introducción al contexto histórico desde el punto de vista político y narra la última misión de 'La Mercedes'. La comisaria destaca también «a diferencia entre excavación arqueológica y expolio», en un muestra que concluye con piezas relacionadas con la batalla en los juzgados en defensa del Patrimonio Cultural subacuático.

El Museo Naval, que ha multiplicado notablemente la afluencia de visitas a sus salas desde que estalló el caso de 'La Mercedes' se centra en el creciente interés social por el caso a raíz del expolio y en los aspectos navales de la historia. Se muestra al labor de la Armada para proteger el patrimonio subacuático, o en la conservación de unos documentos que fueron cruciales para que España ganara el litigio.

Articulada en seis espacios, reúne 80 piezas casi todas del siglo XVIII y del primer tercio del siglo XIX. Hay pinturas, mapas y carta náuticas de la época, documentos muy variados, instrumental científicos, de navegación y de construcción naval, y una espectacular recreación escenográfica de la cubierta de la fragata y del camarote del comandante.