LA SALUD PÚBLICA EN ALERTA

El copago sanitario supone un doble gasto para los ciudadanos

Grupos en defensa de la sanidad pública denuncian que la crisis sirva de coartada para privatizar por intereses económicos y políticos

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El copago sanitario supone que los ciudadanos paguen dos veces, la primera con sus impuestos y la segunda con las nuevas tasas de los servicios de salud, según el estudio ‘El copago sanitario: resultados para el sistema sanitario y los pacientes’ presentado hoy en Madrid por Manuel Martín García, el presidente de la Federación para la Defensa de la Sanidad Pública y autor del informe.

Y es que, según el estudio, es falso que la Administración no tenga recursos para financiar la sanidad pública ya que con la privatización “se ha demostrado que se aumenta el gasto”, por ejemplo, al duplicar los costes burocráticos. Según el doctor Martín, desde que se privatizó parte de la sanidad en Reino Unido su gasto administrativo ha subido del 5 al 15% del total del presupuesto del ministerio de Sanidad británico. Y eso sin contar que el empeoramiento de los niveles de salud básica supone un gasto mayor a largo plazo porque “si una persona no se medica porque no puede pagar las medicinas, tendrá que acudir al hospital con una dolencia mucho mayor y un tratamiento más caro que si se hubiera curado en su casa”.

“La crisis está sirviendo de coartada”, ha afirmado el doctor. “Nos intentan convencer de que el sistema sanitario es imposible de mantener y eso es falso” porque, según el estudio, los niveles de gasto sanitario per cápita en España son de los más bajos de la OCDE. En 2008, “cuando aún no se habían producido todos los recortes en sanidad que vendrían más adelante”, la media de gasto de los países era de 3.223 dólares por habitante y en España de 3.057. Sin embargo, Estados Unidos presentaba un gasto per cápita de 7.960 dólares. Según el doctor Martín, se han adoptado recortes sistemáticos en los presupuestos sanitarios “basados en el falso argumento de un gasto desmedido” y, como consecuencia, en 2013 se destinaron 7.500 millones de euros menos que en 2010 a la Sanidad.

Los problemas de financiación de la sanidad pública tienen que ver, según el informe, con una baja presión fiscal en los sectores económicos más poderosos, muy por debajo de la media de los países europeos. Y es que, mientras la media de los quince países de la UE fue de un 46,1% del PIB en 2013, en España se redujo al 35,5% lo que significa que “el Gobierno y los sectores económicos privilegiados pretenden mantener una baja presión fiscal para beneficiar a los grupos de mayor renta, a las grandes empresas y a los inversores internacionales”, afirma el doctor en el estudio. Asimismo, Martín ha añadido que lo que puede poner en riesgo la sostenibilidad del sistema es el “enorme fraude fiscal” que se estima en torno al 25% del PIB, un 48% superior a la media de los países europeos. “El fraude alcanza los 44.000 millones al año y el gasto sanitario es de 60.000 por lo que si el Gobierno controlara este tema no habría ningún problema para financiar la Sanidad”, ha explicado.