Los rebeldes llegan a la capital de la República Centroafricana

Las milicias de la coalición insurgente Séléka han entrado este sábado en la capital de República Centroafricana por el norte y combaten ya con las fuerzas gubernamentales, según ha informado un corresponsal de la agencia de noticias Reuters.

Los guerrilleros han obligado a los militares a retroceder y controlan ya un barrio del norte de la ciudad, donde se encuentra la residencia particular del presidente François Bozizé. Fuentes oficiales han señalado que Bozizé se encuentra en el Palacio Presidencial, en el centro de la ciudad.

Un portavoz de la propia guerrilla, Nelson Ndjadder, ha confirmado la información y ha informado además de que han derribado un helicóptero del Ejército que había realizado varios ataques contra las fuerzas rebeldes desde el viernes. "Nuestras dos columnas se dirigen ahora hacia el Palacio Presidencial", ha indicado Ndjadder.

Un alto responsable de las fuerzas de la misión internacional de paz en República Centroafricana ha confirmado en declaraciones bajo condición de anonimato que hay combates entre insurgentes y fuerzas gubernamentales dentro de Bangui y que un helicóptero militar ha sido derribado. "Los rebeldes podrían tomar Bangui esta misma tarde. Los combates continúan y aún hay algo de resistencia", ha explicado. Ahora los integrantes de la fuerza de paz se replegarán hacia el aeropuerto de la ciudad. Unos 400 militares sudafricanos se encontraban en Bangui para ayudar a formar a militares centroafricanos y, según fuentes de la misión de paz, han combatido junto a las tropas gubernamentales.

Ante esta situación, Francia ha pedido una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de la ONU. Por el momento, París no ha solicitado la evacuación de los aproximadamente 1.200 franceses que residen en la República Centroafricana, pero les ha pedido que se mantengan en sus domicilios para evitar problemas. Además ha enviado un contingente a Bangui para evitar que los insurgentes tomen el aeropuerto de la ciudad.

La coalición Séléka, compuesta por cuatro grupos rebeldes, se alzó en armas en el norte del país el pasado mes de diciembre al considerar que Bozizé no había respetado unos acuerdos de paz firmados en 2007.