FÚTBOL | COPA DEL REY

Los porteros marcan el clásico

La lesión de Casillas y la rotación de Valdés ponen el foco en los guardametas

BARCELONA Actualizado: Guardar
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En el empacho de clásicos de los últimos años entre Liga, Copa del Rey, Liga de Campeones y Supercopa de España, tantos que ya se ha perdido la etiqueta de partido excepcional, siempre han habido protagonistas en los días previos que han acaparado la atención informativa: las batallas psicológicas entre Jose Mourinho y Pep Guardiola; el morbo posterior de ver al portugués enfrentándose a Tito Vilanova, el hombre a quien agredió metiéndole un dedo en el ojo; el pulso de 'cracks' que siempre enfrenta Cristiano Ronaldo y Leo Messi; la presencia de Pepe en el césped tras alguna de esas entradas que han dado al vuelta por los barrios bajos de todo el mundo; las provocaciones de Piqué o el teatro de Di María y Busquets... Pero llega la ida de la semifinal de Copa 2012-13 en el Santiago Bernabéu y por primera vez las dos porterías lo eclipsan todo. En ellas no estarán Iker Casillas, el guardameta que lo ha jugado todo en los últimos años, ni Víctor Valdés, que siempre descansa en la Copa. Es el turno de Antonio Adán, con permiso de Diego López, y Pinto.

Será un clásico sin porteros habituales ante dos delanteros como Cristiano y Messi, dos devoradores que aprovechan cualquier duda o debilidad para acribillar al rival, dos talentos insaciables que si pueden marcar cinco no se conforman con menos. Para Pinto, más acostumbrado y experto, la situación no es tan incómoda. Pero para Adán, en el punto de mira de la crítica por culpa o gracias a Mourinho, el momento es una novedad.

Iker Casillas fue operado el viernes de una fractura en la base del primer metacarpiano de la mano izquierda tras una patada involuntaria de su compañero Arbeloa en el Valencia-Madrid de Copa. Estará de baja entre ocho y doce semanas, lo que ha obligado al Madrid a moverse rápido en el mercado para fichar por casi 4 millones de euros a Diego López, ex del Madrid que en el Sevilla era ahora suplente de Palop. Para la Copa hay que decantarse por Adán como titular porque fue la apuesta de Mourinho en este 2013, llegando a sentar a Casillas en el banquillo. Sin embargo, la expulsión y el penalti que cometió en su primera titularidad liguera ante la Real Sociedad devolvió a Iker a la alineación. Y cuando Adán volvió a jugar en la Copa, en Mestalla, se tragó un gol que obligó a cuestionar el criterio de Mourinho.

Antonio Adán (1987) llegó al Madrid siendo alevín. A sus 25 años, es un misterio con guantes. Se sospecha que el cancerbero de la cantera solo fue un arma arrojadiza contra Iker, una víctima de la actitud maquiavélica el entrenador portugués, que no dudará en el dejarlo tirado en cualquier momento. Y eso es lo que puede estar ocurriendo ya, pues es sabido que Diego López es muy del gusto de Mourinho. Y, por qué no decirlo, es también el preferido del madridismo, que le ha visto completar varias temporadas de mérito en el Villarreal. Ante el Barça, Adán jugará con toda la presión del mundo, más incluso de la que tendría un curtido Diego López.

Si Iker no se hubiera lesionado también sería protagonistas por el complicado mes que lleva con Mourinho. Lo mismo le ocurre a Víctor Valdés. Si no entrara en la rotación habitual de la Copa, también abarcaría todas las miradas por su decisión de no renovar su contrato en 2014. La afición le indultó el domingo, pero que no se fíe: le observarán con una lupa que aumentará sus fallos o imprecisiones.

En el Bernabéu no cometerá ninguno porque es la hora de Pinto (1975), con un Zamora ganado en el Celta y dos Copas del Rey conquistadas como titular. Eso sí, en la final que perdió ante el Madrid, Cristiano le batió de cabeza en la prórroga en una jugada en la que pudo hacer más. Su juego con el pie ha mejorado, pero sigue siendo 'ortopédico' en la estética y crea vuelcos en el corazón del barcelonismo, por un día unido al madridismo en el miedo hacia la propia portería.