La declaración soberanista enfrenta a Esquerra y a Unió

ERC y Unió, socios de gobierno en Cataluña, junto a Convergència, han vuelto a poner en evidencia esta mañana sus diferencias en público a propósito de la declaración soberanista que el Parlament aprobará el próximo 23 de enero. A la propuesta del líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, de redactar un nuevo texto que sea capaz de contar con el apoyo de ICV y el PSC, que hoy por hoy no respaldan el que han consensuado CiU y ERC porque entienden que va más allá de la mera defensa del derecho a decidir, el presidente de Esquerra, Oriol Junqueras, ha expresado esta mañana que de ninguna manera "entiende la necesidad de volver a comenzar la redacción del texto”, porque, el que han pactado CiU y Esquerra ya tiene la "mayoría absoluta" en el Parlament, es decir, 71 de los 135 diputados de la Cámara catalana.

Junqueras, eso sí, se ha mostrado dispuesto a introducir enmiendas al actual redactado, que incluye que el pueblo catalán tiene derecho a decidir para hacer efectiva la constitución de Cataluña en un nuevo Estado dentro del marco de la Unión Europea, para tratar de que ICV y las CUP puedan acabar sumándose al texto y por tanto que cuente con casi el apoyo de los dos tercios de los parlamentarios. Unió, en cualquier caso, ha insistido en la idea que planteó Duran de reiniciar el proceso, para que se sume el máximo de fuerzas posibles en el Parlament, y esta mañana ha propuesto además posponer el debate, fijado para el 23 de enero, para que CiU y ERC sean capaces de consensuar una declaración a favor del derecho a decidir que puedan respaldar PSC e ICV. "Todo lo que reste de 107 diputados (todos, menos el PP y Ciutadans) es la línea roja que deberíamos tener presente para que la propuesta de resolución salga con el máximo de apoyo y fortaleza del Parlament", ha señalado esta mañana Marta Llorens, portavoz de Esquerra.

El PSC, por su parte, ha pedido a CiU y ERC "rebajar el contenido y cambiar las formas". "El procedimiento ha sido absolutamente equivocado. El proceso ha empezado muy mal", ha lamentado Pere Navarro, primer secretario de los socialistas catalanes, que se niega a que la resolución abogue por un estado propio. El PSC, mientras, impulsará una reforma constitucional desde el Parlament, como alternativa a la declaración de los partidos nacionalistas. La propuesta socialista insta el gobierno central a reformar la Carta Magna y a permitir la celebración de una consulta legal y acordada.