«Yo no maldigo mi suerte porque madero nací»

Cientos de policías convocados por los sindicatos minoritarios del cuerpo se concentraron hoy ante el Ministerio del Interior para rechazar los recortes salariales. La protesta transcurrió en un tono festivo y con escasa vigilancia policial. Uno de los cánticos más celebrados fue el «yo no maldigo mi suerte porque madero nací.», versión libre del «Soy minero» de Antonio Molina.

La concentración estaba convocada por la Confederación Española de Policía, la Unión federal de Policía y el Sindicato Profesional de la Policía y reunió a varios centenares de agentes, 3.000 según los organizadores, que con sus gorras azules del Cuerpo Nacional de Policía y muchas banderas españolas se dieron cita a mediodía ante el edificio del paseo de la Castellana de Madrid. El mayoritario Sindicato Unificado de la Policía no se sumó al acto porque ha convocado una manifestación el 17 de noviembre en Madrid con el mismo motivo, y a la que se espera que acudan miembros de los distintos cuerpos de seguridad españoles.

El lema de la protesta era 'Haz un corte a los que te recortan', pero proliferaron las pancartas con todo tipo de frases y reivindicaciones. «Los policías no aguantamos más», «Si quieres policía, págala» o «El mismo perro con distinto collar», que mostraba dos fotografías del mismo perro con un cartel del PP y otro del PSOE al cuello.

En la concentración se leyó un manifiesto con las reclamaciones económicas y laborales de los tres sindicatos que se depositó en el Ministerio para que se entregara a su máximo responsable, Jorge Fernández Díaz. El presidente del Sindicato Profesional de Policías, José Ángel Fuentes, señaló que los agentes, además de protestar por los recortes, reclaman «un reconocimiento» a su labor por parte de Interior. En la misma línea, el portavoz de la Unión Federal, Serafín Giraldo, también reclamó que «se valore un poco más» a los agentes. El secretario general de la Confederación Española de Policía, Ignacio López, defendió el derecho de los agentes, como el de los médico o de los profesores, a protestar porque también sufren «los rigores de la crisis» y llevan muchos años de recortes.

Dentro de la política gubernamental de ajustes del gasto, el Gobierno ha suprimido la paga de Navidad para los miembros de las fuerzas de seguridad, se le ha privado de tres días de los seis que tenían para asuntos propios, cobrarán la mitad del sueldo los tres primeros días de baja médica y la cuarta parte en los 20 días siguientes.