Florentino Pérez blinda la presidencia del Real Madrid

Aunque por ahora el Real Madrid es de sus socios, como Barcelona, Athletic y Osasuna, y no una sociedad anónima deportiva proclive a los ‘tiburones’, Florentino Pérez ha decidido modificar los estatutos y endurecer las condiciones para ser presidente. Un blindaje para «velar por la transparencia», aunque a nadie escapa que el objetivo final es facilitar su continuidad y evitar que ingresen en la junta directiva inversores foráneos de dudosa procedencia e intereses espurios.

A partir de ahora, el club exige al menos veinte años de antigüedad ininterrumpida como socio para presentarse a las elecciones a la presidencia, quince para ser vicepresidente y diez para ser directivo. Además, se requiere la presencia notarial en el voto por correo y que el aval para dirigir el club sea registrado en el Banco de España y garantice el 15% del presupuesto general de gastos del club.

«El club es de sus socios, no de terceros, aunque no quiero pensar mal de jeques árabes ni e los rusos», justificó Florentino Pérez, cuya gestión recibió el aplauso generalizado y el masivo voto favorable de los compromisarios en la asamblea celebrada este domingo.

El alto dirigente merengue explicó que cuando regresó, en 2009, el voto por correo estaba en una «situación vergonzosa» y se produjeron unos comicios en los que «se vulneró la voluntad de los socios». Recordó la polémica gestión de Ramón Calderón y abogó por protegerse porque «el poder es muy apetitoso para muchos dispuestos a hacer trampa y a colar a compromisarios que no lo son».

«’Mou’ es el mejor»

«El Real Madrid ha sufrido comportamientos reprobables en el pasado que no pueden permitirse porque éste es un club de leyenda que lleva en el ADN el juego limpio como principio fundamental», manifestó Florentino. A su juicio, los cambios aprobados no suponen una modificación enorme, ya que «el 43% de los asociados cuentan con más de 20 años de antigüedad y el 85% más de diez».

Con nada menos que 1.229 votos a favor, ocho abstenciones y solo uno en contra, Pérez arrasó a la hora de sacar adelante las cuentas correspondientes al ejercicio pasado, en el que se alcanzaron 514 millones de euros de ingresos, con un crecimiento del 7% que no es desdeñable en tiempos de crisis. El presupuesto de la actual campaña prevé ingresar 517 millones que ayudarán a rebajar una deuda financiera reducida a 125 millones. Unos números importantes que «permiten mantener la estabilidad deportiva y social del club». Las votaciones volvieron a celebrarse a mano alzada, un sistema lento, pero «el más democrático», en opinión del presidente, y controlado por la empresa Indra.

Entrado en arena deportiva, Florentino se deshizo en elogios al técnico José Mourinho, con plenos poderes desde que acabó con Jorge Valdano, antaño hombre de plena confianza del presidente. Defendió la renovación del técnico luso hasta 2016 porque «es el mejor entrenador y se identifica con el espíritu del club». Considera que en su doble función, de entrenador y director técnico, les transmite «energía, conocimiento y ganas de victoria». Se detuvo en los logros de la campaña reciente, calificó la pasada Liga como «la mejor de la historia, con unos números de ensueño», y para la actual exigió a la plantilla que luche por todos los títulos, con el «gran reto de la ansiada décima Copa de Europa» como faro.

«Kaká, amortizado»

Habló de Kaká, el tema quizá más polémico de la asamblea, aseguró que no se le intentó vender este verano y sorprendió al afirmar que se trata de un jugador que desde el punto de vista económico le ha «salido bien» al club blanco pese a que su fichaje, procedente del Milan, costó en torno a 65 millones. «Kaká nos ha hecho ganar mucho dinero en el club. Vino hace tres años como una inversión. Cambiamos muchos contratos gracias a su imagen. Es un activo que ya está amortizado. No hemos intentado venderlo», subrayó.

Tan cómodo se sintió Florentino en la asamblea que sacó pecho con el baloncesto. Alabó al equipo entrenado por Pablo Laso por «saldar cuentas pendientes y recuperar las sensaciones de triunfo» con la consecución de la Copa del Rey y la Supercopa. Se felicitó por el traslado del equipo al Palacio de los Deportes y dejar la Caja Mágica. Garantizó que con una plantilla que dispone de Rudy Fernández como estandarte, se puede «aspirar a luchar por todos los títulos».