Rajoy subirá el IVA en 2013

El IVA, cuya última subida en 2010 calificó de «disparate» el actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, cuando estaba en la oposición, volverá a aumentar en 2013, tal y como pronosticaron la mayoría de expertos y servicios de estudios económicos, para ayudar a aumentar los ingresos y reducir el elevado déficit público. El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, anunció este viernes un incremento de «la imposición al consumo», eufemismo con que, aclaró después, en un corrillo y lejos de las cámaras, se refirió al IVA y a los impuestos especiales que gravan el tabaco, el alcohol y la gasolina.

«Se va a producir una modificación de la estructura de la imposición en España, con una reducción de la imposición sobre el trabajo y un aumento sobre la imposición al consumo», explicó De Guindos en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Pero esa reducción de la imposición sobre el trabajo no será una rebaja de la presión fiscal sobre los asalariados. Fuentes del Ministerio de Economía confirmaron que el plan del Ejecutivo es que se sustancie en una rebaja de las cotizaciones sociales que pagan las empresas a la Seguridad Social, una vieja demanda que la patronal CEOE viene exigiendo desde que estalló la crisis.

Este nuevo golpe a la capacidad de consumo de las rentas de los hogares se sumará al incremento de tipos del IVA que decretó en 2010 el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que incrementó del 16% al 18% el tipo general -el que afecta a la inmensa mayoría de productos- y del 7% al 8% el reducido, que penaliza la compra de productos de primera necesidad. Aquel incremento generó al Estado unos ingresos extraordinarios de más de 6.000 millones de euros.

Para 2013 el objetivo general es mejorar la recaudación en 8.000 millones de euros, más otros 1.000 millones que aportará el aumento del IRPF que aprobó Rajoy en el consejo de ministros del 30 de diciembre de 2011.

Pero ni el ministro De Guindos, primero, ni luego su departamento, tuvieron a bien concretar qué parte de la subida de los ingresos esperada el año próximo generará el IVA, ni cuánto crecerán los gravámenes. El resumen distribuido a la prensa de la senda de consolidación fiscal aprobada para 2012-2015 sólo detalla que las futuras subidas permitirán mejorar ocho décimas la recaudación por impuestos indirectos, del 9,8% este año al 10,6% el que viene. Por otro lado, estima una rebaja de 0,5 puntos en los ingresos por cotizaciones sociales, del 13,2% al 12,7%.

Las fuentes consultadas especificaron que los 8.000 millones de aumento de recaudación será el saldo positivo para el Estado tras aplicar la subida de impuestos y la rebaja de cotizaciones a las empresas. Eso hace esperar una subida fiscal aún más agresiva de lo que sugiere un aumento de ingresos 8.000 millones, ya que, además de proporcionar más recursos a las arcas públicas, el incremento de los tributos deberá compensar los menores recursos derivados del descuento en las cotizaciones que el Estado hará a las empresas.

'Cruzada' de Montoro

El Gobierno había insistido durante toda la campaña electoral en que no subiría el IVA. En particular el actual ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, quien como anterior responsable del equipo económico del PP en la oposición, encabezó una 'cruzada' en el Parlamento contra esta medida. En enero, pocas semanas después de llegar al poder, aseguró en una entrevista al diario ABC que «subir el IVA duplicaría la caída de la economía». Ahora, como jefe máximo del departamento que gestiona los tributos, le corresponderá aplicar el incremento.

Su compañero, Luis de Guindos, explicó que el Gobierno ha tomado la decisión de subir el IVA el año próximo y no éste porque cree que entonces «se inicia ya la recuperación». «Tenemos que, evidentemente, ir reduciendo la imposición sobre el trabajo e ir incrementando la imposición sobre el consumo», tal y como -defendió- recomienda el FMI. «El problema de la elevación de la imposición indirecta es que, cuando se produce en entornos depresivos, los acelera. Por tanto, en 2013 pasamos del trabajo al consumo», resaltó.

La senda de consolidación fiscal aprobada por el Ejecutivo mantiene una reducción del déficit al 3% que marca el pacto europeo de estabilidad en 2013, para después reconducirlo al 2,2% en 2014 y al 1,1% en 2015. El ansiado equilibrio presupuestario llegará en 2016, aseguró Luis de Guindos.