El ánimo del Barça y la esperanza de Villa

El domingo se cumplen cuatro meses de la fractura de la tibia izquierda que sufrió David Villa en las semifinales del Mundial de clubes de Japón. Operado el 19 de diciembre en Barcelona de la grave lesión, se le diagnosticaron entre cuatro y cinco meses de baja. La previsión más optimista, que le hubiera permitido incluso llegar al inminente clásico del Camp Nou, no se cumplirá, pero su recuperación ha entrado en la recta final. El 'Guaje' espera poder echar una mano al Barça en algún partido y confía en llegar en condiciones de ser convocado por Vicente del Bosque para la Eurocopa.

Para ilustrar ese estado físico y anímico, nada como una fotografía reveladora que el propio delantero asturiano distribuyó a través de su twitter. Temprano, acompañado de su compañero y amigo Sergio Busquets, del recuperador Emili Ricart y del encargado de la atención a los jugadores, Pepe Costa, hizo cumbre en La Mola, una montaña de 1.104 metros de altitud que pertenece al Parque Natural de Sant Llorenç del Munt i l'Obac, en la comarca barcelonesa del Vallès Occidental, el faro de ciudades como Terrasa y Sabadell.

La excursión no conlleva ninguna dificultad, es un paseo habitual de familias con niños, incluso numerosos atletas la hacen corriendo, pero en el caso de Villa es significativa porque es un ejercicio habitual que incluye Emili Ricart en la recuperación de los lesionados. Por el Monasterio Románico del siglo XI que corona la cima han pasado ilustres accidentados como Xavi (vecino de la zona), Iniesta, Eto'o, Gabi Milito, Cesc, Afellay y muchos más que, además de recrearse con las espectaculares vistas (es la montaña más alta de los alrededores hasta el mar), han endurecido los músculos y han ganado confianza al andar con paso rápido por un terreno inestable, la finalidad del fisioterapeuta azulgrana. Y el siguiente paso después de subir a La Mola suele ser ya el césped de la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí, las botas de fútbol y los primeros entrenamientos con el grupo, el gran momento que está esperando Villa.

La imagen del 'Guaje' en La Mola, junto al alta médica de Afelllay casi siete meses después de su lesión en la rodilla, sin olvidar el trasplante de hígado de Abidal que evoluciona bien, son buenas noticias que fortalecen el ánimo de un Barça que se siente fuerte en el tramo decisivo de la temporada y muy animado pese a que el Real Madrid mantuvo la distancia de cuatro puntos en el derbi madrileño. «Lo único que podemos hacer es ganar y esperar, el equipo está muy animado, no hace falta decirlo, eso ya se ve», comentó el propio Villa, quien tras su excursión montañera apadrinó la octava edición de libro 'Relatos Solidarios', escritos por 42 periodistas con fines benéficos. El objetivo de la presente edición es recaudar fondos para construir un espacio de ocio para los adolescentes del Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona. En una jornada de protagonismo para el asturiano, acabó hablando de su recuperación con prudencia: «Se están cumpliendo los plazos marcados y la pierna está respondiendo, estoy con ánimo y ganas de volver a jugar, pero sabiendo que hay que cumplir unos plazos».